¿Te consideras una adicta a la belleza?
¡Completamente! Se ha convertido en todo un estilo de vida para mi. Estoy obsesionada con todo lo que tenga que ver con el universo 'beauty': productos, técnicas, tendencias… Nunca tengo suficiente. Para mi, verme bien por fuera me hace estar bien por dentro. Pero creo que es igual de importante cultivar la belleza interior, para mi son dos conceptos que van de la mano.
Descríbenos tu rutina de belleza diaria. ¿Eres constante con ella o sueles saltártela?
Cada día tengo una agenda diferente, pero mis rutinas de belleza siempre se mantienen. Si un día tengo trabajo de oficina, llevo el mínimo maquillaje posible, que para mi suele ser corrector, polvos, lápiz de cejas y bálsamo labial. Me pongo extensiones de pestañas una vez al mes, así que el paso de aplicarme la máscara me lo puedo saltar.
Cuando tengo reuniones o imparto algún taller, me encanta lucir más elaborada y completo mi rutina de maquillaje con 'contouring' y ojos delineados.
¿Cuánto tiempo tardas en arreglarte cada día?
Mi rutina básica de maquillaje me lleva solo 10 minutos. Arreglarme un poco más puede tomar 30 minutos o más según la ocasión.
¿Qué cosmético compras siempre?
¡Me encantan los labiales nude! Tengo de todas las marcas y la verdad es que casi todos son idénticos… pero no puedo parar de coleccionarlos. Es casi una enfermedad, la verdad…
¿Cuál es tu producto 'low cost' favorito?
Los kits de 'contouring' de Nyx Cosmetics, tanto los que son en crema como en polvo. Tienen una gran calidad y son muy económicos en comparación con los demás que hay en el mercado. Además son de tamaño grande, así que duran más que los de otras firmas.
Nadie tiene el pelo que quiere, ¿con cuál has soñado tú?
Tengo el pelo muy fino, así que me da mucha envidia ver melenas voluminosas y gruesas… Por eso creé mi propia línea de extensiones capilares con la marca BombayHair.
¿Te has arrepentido de algún corte de pelo (o tinte) que hayas llevado? ¿De cuál?
Todos tenemos al menos una historia de terror capilar… ¡Yo he tenido muchas! La peor fue cuando tenía 16 años y quería el corte 'Rachel' de Jennifer Aniston. Su pelo era perfecto, a la altura de los hombros, con capas y un volumen 'sexy'… En lugar de eso, yo acabé con el pelo como una pirámide, literalmente cortado a escalones. El resultado fue tan desastroso que, cuando volví para que me lo arreglaran, tuvieron que cortármelo a lo 'garçon' y con la nuca rapada. No hace falta que diga que me tiré llorando todo el camino de vuelta a casa…
Un cosmético que te llevarías a una isla desierta.
Lo primero de todo, protección solar. Es lo único que podría salvarme si llegara a ese punto.
¿Saldrías a la calle sin maquillaje?
Me tomo mi rol como educadora de belleza muy en serio: tengo cientos de alumnos alrededor del mundo que están aprendiendo en mi escuela de maquillaje virtual. Por ello, para mi es muy importante que mi rostro vaya acorde a lo que estoy enseñando. Incluso si salgo a hacer recados, me gusta ir arreglada por si me cruzo con algún 'follower' y me pide una foto.
Un perfume que te traiga buenos recuerdos.
Hypnose de Lancôme, lo he llevado durante algunos de los momentos más memorables de mi vida. Incluyendo la primera vez que me enamoré de quién ahora es mi marido.
¿Cuál fue tu cosmético o perfume de la adolescencia?
Recuerdo que me gustaba mucho el perfume de Paris Hilton porque era muy dulce, y también las ediciones limitadas que Escada lanzaba durante el verano… eran muy divertidas.
¿Has hecho alguna locura en el nombre de la belleza?
Lo más loco que he hecho nunca ha sido mostrar mi rostro sin nada de maquillaje en Internet. Tuve que ser valiente para hacerlo, porque la gente suele dejar comentarios muy desagradables en las redes. Pero desde que empecé a hacerlo, he comprendido que todos tenemos inseguridades y, si mostrar mis imperfecciones sirve para que otros aprendan, entonces seguiré haciéndolo.
¿Sigues alguna dieta?
No me gusta la comida de dieta, pero sí que intento mantenerme lo más alejada posible de la comida rápida. Eso sí, me encanta darme caprichos comiendo tarta, galletas, chocolate… pero siempre con moderación. He aprendido que comer un poco de este tipo de caprichos es la única manera de no acabar dándose atracones. Además, nunca tomo cafeína, de modo que así evito tomar muchos azúcares y químicos innecesarios.
¿Haces ejercicio? ¿Cuál?
¡Por desgracia, el ejercicio es mi punto débil! No hago ejercicio nunca, porque no veo la manera de encajarlo en mi agenda. Quizá si algún día pudiera delegar algunas de mis responsabilidades, conseguiría tener algo de tiempo que dedicar al deporte.
¿Cuál es el mejor consejo de belleza que te han dado?
Desmaquillarse todas las noches, da igual lo cansada que estés. ¡Por cada noche que duermes con tu maquillaje puesto, tu piel envejece dos semanas!
