No. Los expertos de Sinclair nos dicen que nada más lejos de la realidad y de hecho nos distinguen los siguientes:
Relleno de ácido hialurónico
"Son ideales para rellenar volúmenes perdidos. Es decir, para tensar las zonas que han quedado "vacías". También son ideales para eliminar las ojeras, arrugas en la zona del entrecejo y retoques en los labios", nos cuentan. Añaden que debido a sus propiedades también mejoran la hidratación, ya que la molécula de ácido hialurónico atrae el agua. Suele ser suficiente con una sesión anual según qué caso.
Estimuladores de colágeno
"Los de Policaprolactona son un todo en uno que tensa, da volumen y regenera la piel con todo lo que conlleva: luminosidad, jugosidad o tersura, entre otros", afirman. El efecto es progresivo y por tanto, más natural. No sólo mejoran el aspecto, sino que también frenan el envejecimiento porque ayudan a producir colágeno nuevo, que con el tiempo se perderá como es lógico pero de forma más lenta que con otro producto infiltrado con un ciclo de vida más limitado de antemano.
Lo importante: que el especialista sepa analizar bien cada caso, sepa cómo ponerlo y no ponga más de lo necesario. Y cuidado, porque no todos los estimuladores de colágeno son iguales. Los de hidroxiapatita cálcica pueden acartonar la piel y quedar poco naturales.
Mesoterapia
"Generalmente revitaliza la piel por las características de su composición a base de vitaminas, minerales, oligoelementos y ácido hialurónico y por eso queda un poco más firme, con más luz y revitalizada. Es ideal hacerla cada 3 o 4 meses", aconsejan.