Hace años, la actriz de Modern Family de sólo 17 años, Ariel Winter, declaraba en una popular revista haberse sometido a una cirugía de reducción de pecho, disminuyendo tres copas de volumen.

'Era muy doloroso, tenía ya problemas de espalda. No podía permanecer erguida durante mucho tiempo. Empezó a dolerme tanto que ya no aguantaba. Había discutido con mis médicos sobre la reducción desde hace años, hasta que te dije que lo había pensado bien y mi doctor me dijo: 'Tu espalda te lo va a agradecer', decía Winter.

María Pombo también ha decidido hacérselo y hablar de ello, en su día, Dulceida también hizo lo mismo.

Pero no solo las celebrities deciden pasar el mismo proceso para quitarse un peso que, cuando es excesivo, puede llegar a a ser insoportable. Y no solo eso, el descolgamiento que supone llevar gramos de más, la distensión de la piel y otros factores hacen que también se necesite hacer una elevación mamaria o mastopexia, al mismo tiempo que la reducción de pecho.

Para saber todos los detalles e información de esta cirugía, hablamos con la Dra. Pilar de Frutos.

1. ¿Cuál es la candidata ideal para una reducción de senos?

Una mujer cuyo exceso de volumen en esta parte provoca problemas en su vida diaria, más que los puramente estéticos, pudiendo provocar verdaderas complicaciones físicas como dolores de espalda.

La finalidad es conseguir una mejor calidad de vida además de una figura más armónica y proporcionada. Es importante estar en nuestro peso o en el que podamos y queramos mantener. Modificarlo mucho después de la cirugía afectará a los resultados.

2. ¿En qué consiste el proceso?

Es una intervención relativamente habitual que debe realizarse bajo anestesia general y que suele requerir al menos de un día de ingreso hospitalario. La duración media es de 3 a 4 horas pudiendo variar según la complejidad de cada caso.

Existen diferentes técnicas para realizarla, la elección de la misma dependerá de las características de la mama, la piel y del volumen a reducir, siendo uno de los puntos claves la toma de medidas y marcación preoperatoria.

El objetivo es disminuir el tamaño mediante la extirpación de grasa, tejido mamario y piel, haciendo el pecho más pequeño, ligero, mejorando su forma y su firmeza, de manera que la nueva mama se moldea consiguiendo un resultado estético armónico.

A su vez se eleva y si es necesario se reduce la areola.

ariel winter reducción de pecho
Leon Bennett//Getty Images

3. ¿Qué talla se me va a quedar?

Aparte de que la paciente diga claramente sus expectativas en cuanto a esto en las consultas previas, la talla final depende tanto de su complexión, contorno torácico, la anchura de la base mamaria, la distancia a la que se encuentre el complejo areola pezón, calidad cutánea y los limites que existen para realizar la reducción de un manera segura en cada caso.

Existen unos patrones de marcación que se modifican según las características concretas de cada mama.

4. ¿Podré dar el pecho?

Al retirarse parte de glándula es probable que no sea posible la lactancia materna en un futuro.

5. ¿Cómo es el postoperatorio?

Las molestias se controlan bien con medicación, aunque los primeros días es normal tener sensación de cansancio. La media para volver a hacer vida normal sin esfuerzos oscila entre 12-14 días. Para ver resultados definitivos hay que esperar unos 6-8 meses.

6. ¿Cómo serán las cicatrices?

Hay distintos tipos de cicatrices en función de la técnica que se empleé. Cuanto mayor sea el exceso a retirar, mayor será ésta. Puede haber más complicación en fumadoras. Su maduración total requiere un año. Son permanentes pero los puntos de sutura internos ayudan a que se marquen lo menos posible.

7. ¿Cambiarán las relaciones sexuales y la sensibilidad?

Es habitual notar aumento o disminución en la sensibilidad en la piel y en los pezones. Pero cabe la posibilidad de perderla permanentemente. Se recomiendan 2 semanas para para tener relaciones íntimas y un mes para un contacto físico intenso.

Para más información consulta con tu médico o clínica.