“El cupping es una técnica milenaria que pertenece a la medicina tradicional china, se conoce como Ba Guan e implica utilizar ventosas para aspirar y eliminar las toxinas del organismo, limpiando el chi (energía)”, explica la esteticista Nuria Torijano. Una de las principales pioneras en nuestro país de esta técnica es la facialista Mariona Vilanova que realiza un masaje manual con ventosas denominado Lift para elevar, esculpir y definir. “Esta singular técnica activa los mecanismos naturales del cuerpo para regenerar los tejidos de manera muy profunda”, asegura. Pues así es, el cupping facial es un tratamiento en el que las herramientas a emplear son un aceite o un sérum deslizante y una ventosa. “La ventosa crea un vacío y posteriormente una succión (fuerza inversa), que ayuda a estimular el riego sanguíneo, el sistema linfático y a tonificar el músculo”, describe Nathalia Arango facialista del centro Opuntia Organic.

¿En qué consiste el cupping facial?

“Lo idóneo es empezar haciendo un peeling enzimático, aunque las ventosas tienen la ventaja de que hacen una exfoliación suave y controlada. Y a continuación se hacen pases con la ventosa, y la ayuda de un aceite o un sérum adaptado al tipo de piel o tratamiento, que favorecen el drenaje linfático y la eliminación de toxinas. Seguidos de pases ascendentes para trabajar la musculatura facial y las fascias (son una red fibromuscular situada entre los músculos y la dermis) y conseguir un efecto lifting. Y, por último, se trabajan los meridianos que pasan por el rostro responsables de activar la energía y los procesos de detoxifiación”, detalla Nuria Torijano. En Opuntia Organic el tratamiento se completa con el uso de otras herramientas, como la piedra Shungit (un mineral con capacidad para purificar, cargar, proteger, curar, sanar y estabilizar el organismo) y la herramienta ayurvédica Kansa Wand (barra de madera con forma de cúpula y metal). “Todas estas herramientas actúan en sinergia para equilibrar el sistema nervioso y potenciar los resultados”, explica Nathalia Arango. Después del tratamiento, Mariona Vilanova, recomienda beber mucha agua para lograr una mayor depuración. “Si se sigue un estilo de vida sano y se hace una dieta alcalina, los resultados pueden durar hasta dos semanas.”

No vale cualquier ventosa

La mayoría de las ventosas son de cristal o de plástico. “En Opuntia Organic contamos con las ventosas de la firma Le Pure que están hechas de cristal y disponibles en dos tamaños: Le Sculpteur Cup Visage y Le Sculpteur Cup Mirage, para zonas específicas como el contorno de los ojos y la boca”, detalla Arango. Pero las copas de cerámica de Mariona Vilanova son el Ferrari del cupping. “Después de un largo estudio e infinidad de pruebas, el resultado es una ventosa de cerámica con un esmalte especial, de tacto sedoso, y con una pera de succión fisiológicamente inocua (libre de ftalatos, bisfenol, cadmio y látex).” Tiene un diseño muy cuidado, es de uso fácil, facilita la técnica y es apta también para el autotratamiento en casa.

Un consejo: Independientemente de la ventosa que elijas extrema la higiene. “Tras su uso, lávala con un jabón suave y agua. Déjala secar en posición vertical, con el bulbo en la parte superior, para garantizar que no queda ningún resto de agua”, recomienda Nathalia Arango.

Sesiones

Se puede hacer una vez a la semana hasta completar un ciclo de 6/8 sesiones en cabina. Después se puede continuar en casa, siempre bien asesoradas por un profesional.

Precio/sesión

Entre 85€ y 120 €.

A favor

El cupping facial se ha hecho famoso por conseguir depurar la piel del rostro, descongestionar el sistema linfático, estimular la circulación y aliviar la tensión muscular. “Las propiedades de este método ancestral van desde reducir la hinchazón (mitigando ojeras y doble mentón), suavizar las líneas finas y las arrugas, reafirmar los pómulos y el óvalo facial o tratar las cicatrices. Al mismo tiempo, con la presión inversa, se limpian los poros y se alisa la piel, dándole suavidad, luminosidad y tersura”, asegura Vilanova. Por su parte, Arango añade: “mejora la elasticidad al promover la creación de colágeno y elastina, estimula la regeneración celular, favorece la oxigenación y regula la producción de sebo (grasa).”

En contra

La duda es ¿la succión que produce la ventosa no produce edema o hematomas? Como siempre, depende de quién la manipule. “En manos inexpertas puede producir hematomas, eritema grave e inflamación” advierte Torijano. Y Arango recomienda aprender la técnica de alguien que sea experto en su manejo.

Por lo tanto no es inocua, de hecho si así fuera, no serviría para nada. Aviso a navegantes: se debe evitar su uso sobre glándulas (tiroides), lunares y verrugas, y lesiones cutáneas. Y “deben abstenerse personas con fiebre, infecciones, diabetes, problemas de coagulación de la sangre, cuperosis, rosácea, capilares frágiles o rotos, rojeces (eritrosis) e inflamación aguda”, advierte Arango.

Dónde

Nuria Torijano (Madrid, tel. 911 69 03 22). Mariona Vilanova (Barcelona, https://marionavilanova.com). Opuntia Organic (Madrid, tel. 911 13 13 53).

masaje facial con ventosas
D.R.

Le Sculpteur (115 €), de Le Pure

Combo de ventosa facial y aceite orgánico Midnight Rejuvenation, un lujoso óleo a base de lípidos vegetales crudos muy ricos en nutrientes.

masaje facial con ventosas
D.R.

The Lifting Cup (125 €), de Mariona Vilanova

Copa de cerámica hecha a mano por un artesano en Barcelona, con un esmalte orgánico de tacto sedoso y con un bulbo de succión de material médico (libre de ftalatos, cadmio y látex).