Según los resultados del estudio MultiDecades and Ethnicity de Olay, las mujeres que se protegen de las radiaciones solares pueden tener una piel con un aspecto 20 años más joven que aquellas que se exponen en mayor medida al sol. 

La investigación, que ha utilizado mujeres de diferentes edades y etnias, demuestra que algunas de ellas envejecen a un ritmo mucho menor que otras. Para confirmar la relación de la exposición solar en este proceso, les tomaron muestras de la piel de la cara (completamente expuesta a la radiación) y de la espalda (protegida normalmente del sol) Los resultados demostraron que las zonas protegidas presentaban un envejecimiento hasta 20 años menor. “Las mujeres que evitan y se protegen de la exposición solar tienen más posibilidades de pertenecer a ese grupo de mujeres que aparentan menos edad de la que tienen”, asegura Alexa Kimball, profesora de Dermatología en la facultad de medicina de la universidad de Harvard y principal investigadora del estudio.

Pero los científicos también nos recuerdan que el daño solar no sólo se produce al tomar el sol: la verdadera causa de envejecimiento es la exposición diaria y de baja intensidad. “No son las vacaciones a un destino soleado una vez al año las que provocan los daños, sino la paulatina y progresiva exposición solar en nuestro día a día”, afirma Frauke Neuser, directora de ciencia internacional de Olay. Para evitar este daño progresivo, los científicos recomiendan emplear una hidratante diaria con protección solar. Además, algunos ingredientes como los pentapéptidos pueden contribuir a reducir en cierta medida los daños ocasionados por el sol en la piel, de acuerdo con el estudio.