Dominar el alemán es más fácil. La mayor dificultad que entraña esta arma mágica capaz de cambiar la mirada es conseguir un trazo regular. El liner, en cualquiera de sus variedades, lápiz, líquido o incluso en formato rotulador, está pensado para crear desde efectos sutiles –el equivalente a saber decir 'Hola, mi nombre es tal' en alemán– a líneas mucho más intensas y precisas, casi tiradas con tiralíneas. 

Aplicar (bien) el eyeliner es mucho más que difícil. La web HelloGiggles, comunidad online de mujeres, ha creado un divertido vídeo sobre el asunto. "Porque la lucha diaria con el delineador de ojos es real", explica. Un drama moderno que, recreado por la actriz cómica Christina Wolfgram, ha sido reproducido 39 millones de veces y compartido más de 430.000 en tan sólo cuatro días.

Publicado en Harper's Bazaar España

Vía: Harper's BAZAAR ES