'Co-washing', todo al acondicionador
¿Co-washing? Detrás de esta extraña palabra se esconde la frase 'conditioner washing', es decir, 'lavar con acondicionador'. Esta tendencia, que ha comenzado a cobrar fuerza en la red, argumenta que el acondicionador tiene en realidad una composición parecida  a la del champú, pero con componentes menos agresivos para el cabello: 'Si miras la etiqueta del champú y el acondicionador, verás que los ingredientes son más o menos los mismos.' cuentan desde la web co-washing.com. 'Pero el champú contiene sulfatos (indicados como lauryl sulfate, sodium laureth sulfate u otros), un ingrediente que retira los aceites naturales del cuero cabelludo. Si tienes el pelo seco, los sulfatos pueden resecar tu cabello en exceso y provocar encrespamiento'.

'La función de los sulfatos es la de hacer espuma y limpiar', dice Óscar Sánchez, International Master Trainer de Davines. 'Mucha gente relaciona espuma con limpieza (a más espuma, más limpieza) pero no hay relación'. Y añade: 'Los sulfatos no son estrictamente perjudiciales pero hoy existen alternativas menos agresivas con el cabello y con el cuero cabelludo, como son algunos derivados de aceites naturales que limpian delicadamente sin agredir el cabello o la piel'. Eso sí, no es necesario (si a tu pelo no le va bien) lavar el cabello con acondicionador. Hoy en día, muchas marcas disponen de gamas completas de champús sin sulfatos.

'No-poo'
Esta tendencia va un paso más allá: 'no-poo' hace referencia a 'no shampoo' y aboga precisamente por eso: no usar champú en absoluto y sustituirlo por otros remedios naturales como agua, bicarbonato y vinagre.
Para algunos conversos, este método es lo mejor que ha podido pasarle a su pelo. Según los defensores de esta tendencia, reducir los lavados y hacerlos con sustancias naturales hace que el cabello produzca menos grasa de manera progresiva. Pero los dermatólogos advierten: 'Es correcto que un lavado excesivo puede aumentar la producción de sebo, aunque no podemos afirmar lo contrario: no lavar en absoluto el cabello no va a hacer que no produzcamos nada de sebo', cuenta la doctora Lola Conejo-Mir, dermatóloga y miembro de la AEDV. Y añade: 'Si abusamos del bicarbonato conseguiremos el mismo efecto que con el exceso de champú. Además, el bicarbonato tiene un pH más alcalino que el del cuero cabelludo, pudiendo producirnos irritación, y su uso continuado nos puede decolorar el cabello.'

Primero acondicionador, luego champú
Para algunos, la clave para un pelo diez reside en un cambio de factores. Esto es, invertir el orden de los productos que usamos al lavar el cabello (primero el acondicionador y por último el champú). El revuelo por esta tendencia surge tras un artículo de la periodista Alison Freer en el que desvelaba cómo este método había cambiado el aspecto de su melena.

 ¿Las ventajas? El pelo queda hidratado, pero no pierde volumen, por lo que sería perfecto en cabellos finos. Y lo mejor: probarlo es sencillo, no requiere de ningún ingrediente extra y sus efectos, si no son satisfactorios, se eliminan con otro lavado.

Biotina, ¿ingrediente milagro?
La moda de la botina y el llamado 'champú de caballo' dio mucho de que hablar… Hoy en día, todavía hay muchos productos que incluyen entre sus bondades el hecho de contener biotina, una vitamina que supuestamente fortalece el pelo y lucha contra la alopecia.

'La biotina es una vitamina, del grupo B, que puede tener eficacia en algunos tipos de alopecia pero ingerida, es decir, que no se absorbe de forma tópica (aplicada sobre el cabello, en este caso). Todo este revuelo carece de rigor científico”, señala el Dr. José Carlos Moreno, Presidente de la AEDV.
Por tanto, la única manera de aprovechar la biotina en favor de tu cabello sería ingiriendo la vitamina. Para ello puedes recurrir a suplementos o, mejor aún, incluir de manera habitual en tu dieta alimentos que la contengan. Algunos de ellos son el huevo, las patatas, frutas como el plátano o el aguacate, las almendras o el pescado.

¿Mejor sin siliconas?

Las siliconas presentes en los productos capilares son otro de los ingredientes que han saltado a la luz en los últimos años por sus supuestos efectos negativos. Pero, exactamente ¿qué son las siliconas? Se trata de polímeros empleados para alisar la cutícula del pelo y dejaro suave. 'El problema viene cuando los ingredientes que dan estas propiedades se acumulan, ya que algunas siliconas no son solubles al agua y van dejando residuo en el cabello', cuentan desde Lush. Para otros, sin embargo, su uso está recomendado: 'Las siliconas, a pesar de los que muchas personas piensan, no son malas, de hecho, ofrecen beneficios para el cuidado del cabello como brillo, suavidad, protección contra el daño, etc.', comenta María Castán, directora de comunicación científica de Wella. 'El cabello tratado con silicona luce sano y brillante y sufre menos daño en  la fibra capilar que el cabello sin tratar', añade.

¿La solución? Probar y decidir por ti misma. Para reconocer los productos que contienen siliconas, busca aquellos con algunos de estos nombres en la lista de ingredientes: cyclomethicone, dimethicone, dimethiconol...