Lo sabemos, es verano, te apetece relajarte, disfrutar y saltarte un poco las normas, sobre todo en materia de alimentación. Pero ojo, porque algunos alimentos típicos de esta época pueden pasarte demasiada factura. El que avisa no es traidor, así que aquí te dejamos la lista de alimentos que peor le sentarán a tu salud, a tu estómago y a tu línea, aún en pequeñas cantidades. Tú decides si vale la pena.

Barbecue, Grilling, Barbecue grill, Food, Dish, Churrasco food, Cuisine, Grillades, Outdoor grill, Roasting, pinterest
Getty Images

Carne, pollo y pescado carbonizados

Las barbacoas proliferan en verano. Sin embargo, "las carnes animales cocidas a altas temperaturas, es decir, directamente sobre las llamas o la sartén producen cancerígenos potenciales", dice Verónica Chazín, coach nutricional y nutricionista deportiva (@vero_love_life). Aunque el riesgo depende del tipo de proteína, cuanto más tomas este tipo de comida, mayor es el riesgo para tu salud. Aunque te guste la carne, procura reducir su consumo y tomar más proteínas de origen vegetal.

La mejor alternativa. Si no puede evitar la barbacoa, evita al menos los alimentos de origen animal y toma vegetales. "Aunque se cocinen de esta manera, no generan tóxicos", dice Chazín. ¿No puedes renunciar a la carne? Busca las opciones más magras para que la grasa no gotee sobre las llamas, córtala en porciones más pequeñas parea reducir el tiempo de cocción o marínala antes (esta preparación reduce la aparición de tóxicos). Y respecto al pescado y al pollo, también debes vigilar la temperatura y el tiempo de cocción para que se conserven las propiedades del alimento y no resulten peligrosos: 145 grados para el pescado y la carne, 160 grados para las hamburguesas y cerdo, y 165 grados para las aves de corral.

Drink, Rum swizzle, Drinking straw, Non-alcoholic beverage, Blue hawaii, Slush, Italian soda, Cocktail, Blue lagoon, Cocktail garnish, pinterest
Getty Images

Helados procesados o conos de nieve

Este tipo de helados (los que compras en el súper o los que se anuncian en carteles) suelen elaborarse con muchas grasas saturadas y azúcares, lo que dispara su índice glucémico. "En el caso de los conos de nieve, típicos de los establecimientos de fast food, se trata básicamente de hielo picado al que se añaden siropes de jarabe de maíz de alta fructosa, azúcares simples que harán que al poco rato tengas más ganas de dulce", explica la experta. Por si fuera poco, estos siropes pueden contener colorantes peligrosos, como el Azul. "Además, ambas son opciones altamente calóricas", añade.

La mejor alternativa. Un polo de hielo hecho con fruta real, un coco de verdad con una pajita, una limonada casera o un helado artesano.

Lime, Key lime, Persian lime, Green, Lemon-lime, Sweet lemon, Citrus, Lemon, Plant, Fruit, pinterest
Getty Images

Frozen margaritas, piña colada o cócteles embotellados

Los cócteles helados, como las típicas jarras de margarita, son la peor bebida que puedes tomar. "Además de contener un elevado grado de alcohol, llevan una gran cantidad de siropes como los anteriores, lo que eleva hasta una cifra alarmante el índice glucémico y la cantidad de calorías", afirma la coach nutricional. Respecto a los cócteles embotellados, según Chazín, "por muy atractivo que sea el envase, este tipo de bebidas lleva un montón de ingredientes indeseados que disparan la cantidad de azúcar y el riesgo para la salud". Este tipo de bebidas, típicas también de los establecimientos de comida rápida o mexicana no harán sino disparar tu apetito y ralentizar tu metabolismo.

La mejor alternativa. Si realmente quieres tomar alcohol, escoge mejor whisky o ginebra con soda o limón exprimido, libre de azúcares añadidos. Y una recomendación más: después de tomar cualquier cítrico, toma agua para evitar que el ácido dañe tus dientes o procura tomarlo con pajita.

Finger, Food, Hand, Finger food, Nail, Baked goods, Ingredient, Cuisine, Fast food, Snack, pinterest
Getty Images

Perritos calientes

La Organización Mundial de la Salud relaciona directamente el consume de la carne procesada de las salchichas con el cáncer colorrectal. El resto de carnes procesadas también se relacionan con el cáncer de estómago. Una advertencia que también se extiende a las carnes y productos salados, curados o ahumados (salami, jamón, pavo…). "Para que lo tengas claro, la OMS clasifica las carnes procesadas en la misma categoría que el amianto o el tabaco", apunta Chazín.

La mejor alternativa. Un filete de pollo o pescado, carne fresca y sin procesar, es decir, materias primas. Y si te apetece comértelos en plan bocadillo, escoge bien el pan que tomas: los especiales para hot dog o hamburguesas suelen ser ultraprocesados, es decir, hidratos de digestión rápida con muy pocos nutrientes interesantes.

Bird's eye chili, Malagueta pepper, Chili pepper, Tabasco pepper, Food, Cayenne pepper, Serrano pepper, Peperoncini, Vegetable, Bell peppers and chili peppers, pinterest
Getty Images

Ajo, cayena y alimentos picantes

"Si queremos controlar nuestro sudor, vamos a olvidarnos de comer esos burritos picantes o de utilizar la guindilla como condimento", dice Chazín. Según estanutricionista, "la capsaicina, el componente que contienen los ajos picantes y alimentos con esta propiedad es un irritante que activa las glándulas sudoríparas y provoca ese efecto de sudoración incontrolable.

La mejor alternativa. Si no podemos resistirnos al picante, podemos añadir frutos secos a la comida. Según Chazín, "la grasa de los frutos secos ayuda a compensar el sabor picante, por lo que unas nueces, anarcardos o incluso incluso tahini (la pasta de sésamo tostado) pueden ser opciones para no privarnos de esto".

Corn kernels, Sweet corn, Corn on the cob, Corn, Corn on the cob, Food, Cuisine, Vegetable, Vegetarian food, Hominy, pinterest
Getty Images

Mazorcas de maíz

Típicas en muchas barbacoas y establecimientos de fast food, son en realidad una opción poco aconsejable para tus dientes y tu figura. Por un lado, la forma de comerlas hace que los restos de los granos se queden entre los dientes, lo que puede causar inflamación en las encías y otros problemas dentales. "Además –apunta Chazín-, el maíz tiene un alto contenido en almidón, un hidrato de carbono poco interesante por su alto aporte de calorías frente a pocas vitaminas o minerales".

La mejor alternativa. Las palomitas de maíz, pero caseras, no de microondas. Aunque un bol pueda parecer muy grande, en realidad la cantidad es menor y contiene menos azúcares y calorías.

Yellow, Wood, Food, Headgear, Dish, Hat, Cuisine, Side dish, pinterest
Getty Images

Helados sin azúcar

"Este tipo de helados presentan el mismo problema que las bebidas 0%: los endulzantes artificiales que contienen pueden hacerte desear más dulce, son poco saciantes y además, el sorbitol y el xilitol, los más utilizados, pueden tener efectos secundarios, como diarrea o malestar intestinal", apunta Chazín. "Por su parte, la inulina, un fibra de sabor dulce que aporta cremosidad en ausencia de grasa, puede causar gases e hinchazón", añade.

La mejor alternativa. Un helado artesano. Una bola de helado "real" no te aportará demasiadas calorías y te compensará por el sabor y los nutrientes, de mayor calidad.

Leaf, Ingredient, Flowering plant, Fruit, Strawberries, Herb, Perennial plant, Natural foods, Still life photography, Produce, pinterest
Getty Images

Té helado sin calorías

Aunque no contengan calorías, según la coach nutricional, "este tipo de bebidas con endulzantes artificiales no son nada recomendables por los efectos negativos que pueden tener sobre tu apetito (tendrás más ganas de dulce) y tu sistema hormonal".

La mejor alternativa. Té helado casero con limón exprimido, miel o estevia.