Deja de boicotear tu dieta
Los errores que estás cometiendo
La sabiduría popular elabora ideas preconcebidas sobre la alimentación que a veces no son verdad y por ser 'lo que dice todo el mundo' no se nos ocurre cuestionarlo. Deja de presionarte y privarte de cosas de las que podrías disfrutar porque crees que son malas para la salud o engordan. Te contamos la verdad.
'Para adelgazar hay que eliminar los hidratos de carbono'
Gracias a el libro '¿verdad?¿mentira?' de la editorial Everest, hemos averiguado que muchas creencias que tenemos sobre la alimentación y que respetamos en nuestra dieta, no son verdad.
Seleccionamos algunas que podrían estar afectándote, y, como consecuencia, frustrándote a la hora de comer a gusto y te las aclaramos.
Según Ismael Díaz Yubero y José Luis Murcia, los autores de este libro, "las dietas que eliminan por completo, o casi por completo, los hidratos de carbono están condenadas al fracaso'.
La pérdida de peso rápida es evidente, pero prolongar este tipo de dietas puede tener consecuencias fatales como patologías renales, sobrecarga del hígado y descalcificación de los huesos.
Además, agota el glucógeno muscular, combustible que sin él aparece sensación de fatiga, lentitud y falta de interés por el ejercicio.
Lo más grave es que afecta al cerebro, impidiendo mantenerte mentalmente activo en tu totalidad.
Después de todo eso, para colmo, una dieta prolongada sin hidratos no ayudrá a a mantener el peso una vez finaliazada ésta provocando el temido 'efecto rebote' al volver a comer con normalidad.
Conclusión: los hidratos son perfectamente compatibles para adelgazar, sólo hay que comerlos de forma moderada y en los momentos adecuados.
Si se hace ejercicio se almacenarán en el músculo y no como grasa.
'Hay que beber mucha agua porque adelgaza'
El agua es acalórica, es decir, que no puede engordar porque tiene 0 calorías. Pero tampoco adelgaza, ya que 'no posee la capacidad de quemarlas'.
Cierto es que consigue un efecto saciante si se ingiere antes de una comida o entre horas, y así, puede retrasarse el hambre.
El problema es cuando se excede la cantidad de agua que los riñones pueden filtrar llegan a sobrecargarse, esta 'adicción' se conoce como potomanía y desquilibria el organismo por exceso de sodio y potasio en sangre, provocando un problema serio.
'El pan engorda y la miga mucho más'
Empezando con que la miga y la corteza parten de la misma masa, y que la primera tiene más concentración de agua que la segunda, por lo que menos nutrientes, tendrá menos calorías.
El pan está compuesto por cereales, pero no es de los alimentos más calóricos.
Su mala fama proviene de que suele comerse con alimentos más calóricos como embutidos o quesos o para 'rebañar la grasas o salsas que quedan', indica el libro.
'La margarina es más sana que la mantequilla'
Aunque los aceites vegetales de la margarina son más saludables que los animales, el proceso de pasar esos aceites líquidos a sólidos y convertirlos en grasas 'trans' son 'más perjudiciales para el sistema vascular que las grasas animales naturalmente saturadas.
'Las legumbreas engordan y no tienen proteínas'
Otro alimento demonizado, como el pan. Como han sido la base de la alimentación de familias muy humildes, se cree que es un alimento muy calórico y con pocas proteínas.
La realidad es que son 'una importantísima fuente de proteínas' además de ser fundamentales en la pirámide alimentaria y una opción estupenda para los vegetarianos o veganos.
Su aporte calórico es como máximo de 160 calorías por 100 gramos, además de contener fibra soluble y rebajar los niveles de colesterol.
'Las infusiones son adelgazantes e ideales en cualquier dieta'
Las infusiones son diuréticas y depurativas, pero no adelgazantes.
Solamente con el cosumo del jugo de estas hierbas no se pierden kilos de forma segura.
El problema es que no deben sustituirse por otros alimentos, ya que su contenido nutricional es prácticamente nulo.
Puede mejorar los resultados de una dieta de adelgazamiento, gracias a la eliminación de toxinas y su efecto saciante, pero no poseen propiedades adelgazantes en sí.
'Las carnes rojas son malas'
No son malas en sí, sólo hay que comerlas en su justa medida para obtener sus beneficios.
Un consumo moderado de carne roja aporta hierro y un alto valor protéico al cuerpo. Además de varias vitaminas del grupo doce como la B1, B2, B3 y B12; todas ellas fundamentales para el organismo.
Un exceso de la misma, claro que puede asociar con el padecimiento de enfermedades coronarias y cáncer de recto y colon.
'La leche de soja es mejor que la de vaca'
Un estudio de la Universidad de McMáster, Hamilton (Canada), revela que la leche de vaca de más adecuada para la recuperación física y el aumento de masa muscular.
Eso no quiere decir que la leche de soja se mala, por supuesto, pero ésta tiene ciertas características menos positivas que la de la vaca, como, por ejemplo; que no está indicada para menores de dos años 'por su alto contenido en fibras, que no permiten la absorción de hierro'.
Antes de consumir alguna de las dos se recomienda leer a conciencia las etiquetas por los aditivos: en la leche de soja abundan ya que son imprescindibles para su fabricación, y en la de vaca, su uso está prohibido.
'Las patatas 'chips' engordan menos que las cortadas en dados o en bastones'
'Engordan más porque absorben mayor cantidad de grasa', explica el libro.
Y continúa 'cuando la patata se corta en láminas finas, la superficie en contacto con el aceite es muy grande y casi todas las células que conforman la rodaja del tubérculo se impregnan abundantemente'.
'Los huevos son malos para el colesterol'
Como las anteriores afirmaciones populares, es mentira.
El reciente descubrimiento de 'Gray y Griffin', dos nutricionistas británicos, ha demostrado que 'el colesterol de los huevos sólo tiene un efecto pequeño y clínicamene insignificante en el nivel de colesterol de la sangre'.
Es más, sólo un tercio del colesterol se origina en la dieta, y la mayoría de sus síntesis se debe a las grasas saturadas (animales o vegetales), no necesariamente ha de venir del huevo.
El huevo es un alimento muy completo y no hay causas justificadas que limiten su consumo, de hecho 'su ausencia de la dieta lleva aparejada una pérdida importante de nutrientes para el organismo'.
'La carne de cerdo es muy grasa'
El cerdo es una animal cuyas partes, mucha gente, creen que engordan o que tienen grasa de manera excesiva.
Pero lo cierto es que algunas partes del cerdo, como el lomo o las chuletas, son tan magras como las de el pollo o la vaca.
¿Te ha sorprendido?
'Los alimentos light no engordan'
Alimento 'light': es aquel cuya reducción calórica es de al menos un 30% del original.
Que un alimento esté etiquetado con ese nombre no quiere decir que no engorde, sólo que es un poco menos calórico.
Hay productos que por su naturaleza son calóricos, como las patatas o mantequillas, y aunque los consumamos en su faceta menos calórica siguen conteniendo muchas calorías y no podemos confiarnos de comerlos libremente pensando que no vamos a engordar.
'La carne de cordero es excesivamente grasa'
No es vedad en todos los casos ni en todas las piezas del animal.
En este animal hay dos tipos de grasa: subcutánea (debajo de la piel entre los músculos o vísceras, rica en ácidos grasos saturados) y la intramuscular (distribuida entre las fibras musculares, alto contendio en los poliinsaturados).
Además, influye la alimentación que haya tenido ese cordero, así como la raza. El cordero español, por ejemplo, es de los menos grasos debido a su triple aptitud de productoras.
En conclusión: el cordero es un alimento muy sabroso que forma parte de la dieta mediterránea y 'aunque es recomendable no abusar, se puede consumir en cantidades moderadas'.
VER VÍDEO
Decálogo para llevarte bien con la comida
Las mejores (y peores dietas) para la salud
16 desayunos para adelgazar bajos en calorías
Recetas sin hidratos de carbono para adelgazar