Depende del tipo de tónico y piel –sobre todo las más delicadas-, pero incluso algunos pueden llegar a ser agresivos. “Su poder de arrastre se basa en ingredientes astringentes que eliminan el maquillaje, pero pueden dejar la piel seca, tirante e incluso provocar micro-inflamaciones en las zonas de piel más sensible, como contorno de ojos y labios”, asegura Gentiane Roblique, Directora de Comunicación Internacional de Filorga (www.filorga.com), que aconseja, en su lugar, el uso de agua micelar.

“La gran diferencia entre un agua micelar y un tónico, es que la primera atrapa la suciedad mediante micelas –moléculas fisiolimpiadoras- y el segundo limpia por arrastre con ingredientes astringentes”, diferencia la experta. Es decir, el agua micelar “actúa con mayor suavidad y absorbe sin roce todo tipo de suciedad, maquillaje, secreciones de sudor o grasa, partículas de contaminación…”, apunta. Además, algunas, como el Agua Micelar, de Filorga, contienen tensioactivos y extractos vegetales que favorecen la reconstrucción de la capa lipídica natural de la piel.