La top estona, aunque es impresionante, es una mujer con los pies en la tierra y muy espontánea y natural. Nos contó que fue descubierta en su Estonia natal por un cazatalentos cuando apenas tenía 14 años. Dice que se siente una privilegiada por haber llegado a lo más alto dentro de su profesión. Para ella lo mejor de ser modelo es la posibilidad de viajar por todo el mundo y poder permitirse el lujo de elegir con quién quiere trabajar ¿lo peor? las largas horas de soledad en los aeropuertos, tener lejos a su familia.

Pese a tener un tipazo increíble, Carmen dice no hacer ningún tipo de deporte en absoluto (las hay con suerte) y nos contó que estar en casa rodeada de su gente es lo que más le gusta. También nos habló de su interés por la política y de su pasión desde que tenía 3 años: el ajedrez¡. ¡Mira la entrevista en vídeo!