El cuatro es el número de las personas que vienen a esta vida a construir en el trabajo, en las relaciones sociales, en el dinero, en el amor... Sus mentes racionales y pragmá­ticas las convierten en una baza segura en lo laboral. Son los grandes gestores y organizadores, el pilar sobre el que se sostiene cualquier estruc­tura, ya sea profesional, fami­liar o sentimental. Otro aspec­to básico de su energía es el ho­gar.

El cuatro necesita una casa acorde a su modelo mental de armonía. Como simboliza el cuadrado, no es casual que el lugar donde reside tenga tanta importancia para él. Su relación con el cuerpo igualmente será un motivo de gran disciplina. El cuatro es materia en movimiento y hacer ejercicio y cuidar la alimentación le aporta un equilibrio no sólo a nivel físico sino también mental y emocional.

En 2011: Éste será un año para abrirse a experiencias humanita­rias e implicarse en proyectos en los que el talento constructor pueda servir a los demás. La oportunidad de sacar a la luz aspectos más generosos y desprendidos llegará en este ciclo.