A todas nos gusta cuando llega la hora de la ducha. Además de asearnos, entramos en un momento de relax (sobre todo después del trabajo) que nos deja como nuevas. Hay incluso personas que deciden ducharse varias veces al día para sentirse limpias.

Cada una tiene su propio ritual de ducha, pero últimamente ha salido de nuevo a la palestra el debate con respecto a este tema. ¿Cuántas veces hay que ducharse al día? Hay quienes afirman que es necesario al menos una vez diaria, y los que rechazan esta idea. Al contrario de lo que puedas pensar con la ducha, hacerlo demasiadas veces puede deshidratar la piel y causar irritaciones y erupciones. Así es cómo debemos ducharnos.

No te obsesiones

Nadie puede negar que ducharse todos los días es bueno para tu higiene. Pero si tu día consta de una ducha nada más levantarte, otra después de entrenar y otra antes de ir a la cama, estás eliminando la grasa natural y las bacterias "buenas" que protegen tu piel.

Cuando te duchas más de una vez al día no dejas tiempo a que tu piel se repare de forma natural. Debilitas la barrera protectora dejando la piel áspera y más susceptible a erupciones, como las espinillas.

Un consejo: Refuerza las defensas de tu piel duchándote con un gel hidratante como el Aquapower Shower Gel. A diferencia de otros jabones, éste limpiará e hidratará tu piel al mismo tiempo.

Agua templada por favor

Sí, lo sabemos. Una ducha caliente es perfecta para las frías mañanas, y una ducha fría lo mejor después de ir al gimnasio. Pero no. Ni lo uno ni lo otro es lo más recomendable para tu piel. Para fortalecerla lo mejor es una ducha con agua templada. No deshidratará la piel como el agua caliente, y no te dará un síncope como con el agua fría (sobre todo tras entrenar).

La Dra. Lebar, especialista en medicina deportiva, lo explica: "Ducharse con agua muy caliente (o muy fría) después de hacer ejercicio puede estresar más tu cuerpo, algo totalmente innecesario". También recomienda esperar unos 10 o 15 minutos antes de introducirte en la ducha para dejar que tu cuerpo se recupere naturalmente y evitar irritar tu piel.

Una ducha al día, como mucho

Aunque no lo creas mucha gente puede estar sin ducharse un día o dos, lavándose solo las zonas más propensas a coger bacterias, como son axilas, zonas íntimas y pies. Y no es una señal de mala higiene. Estas zonas son las que necesitan un lavado diario, pero el resto del cuerpo no. Está bien que te duches a diario, pero no es obligatorio. Las únicas personas que deberían ducharse todos los días son las que entrenan a diario.

En definitiva, ducharse una vez al día – o cada dos días – es la mejor defensa contra la deshidratación e irritación de la piel. Pero no te olvides de echarte crema hidratante facial y una loción corporal después de cada ducha.