La casa que compartían Reese Witherspoon y su ex marido Ryan Phillippe en Bel-Air, está otra vez a la venta por algo menos de 16 millones de dólares, ni más ni menos que 11,5 millones más que el precio inicial de 4,5 millones, en 2004. La inmobiliaria que lo gestiona dice de la casa: "charm a gran escala"
La casa, que tiene un estilo como de iglesia de campo, ocupa casi 4.000 metros cuadrados.
Techos con vigas vistas de madera, suelos de roble, una chimenea de ladrillo con asientos incorporados, cuatro dormitorios y cinco baños completan esta enorme casa de 814 metros cuadrados.
Fuera, se puede disfrutar de una amplia terraza, una zona de barbacoa al aire libre, piscina y spa caliente, y magníficas vistas del cañón.
Toda la propiedad está cuidadosamente escondida tras grandes robles y sicómoros, lo que le otorga la máxima privacidad además de acceso directo a la naturaleza.
Tras su divorcio en 2007, Witherspoon se trasladó a una casa en el Pacific Palisades con su nuevo marido Jim Toth y sus tres hijos.