10 cosas que aprendimos de Bridget Jones

Es lo más feo que te puedes echar encima, pero si lo lleva Mark Darcy, la cosa es muy diferente. No debes tener prejuicios ante alguien que lleve un jersey de reno, porque podéis tener mucho más en común de lo que piensas. Bridget Jones encontró al amor de su vida así vestido y en una fiesta navideña, así que por muy mal que pinte el plan, nunca dejes de apuntarte a él. Y recuerda: la primera impresión no es la que queda.

En las dos primeras entregas, Bridget Jones se debatía entre el tranquilo y flemático abogado Mark Darcy (Colin Firth) y el canalla de su jefe Daniel Cleaver (Hugh Grant). Este era el típico malote, atractivo y muy sexy, pero no, no te conviene. Sabes que va a estar contigo, pero que cuando las cosas se pongan serias no se va a comprometer contigo y que acabará abandonándote. Así que tenlo bien clarito: no todo es tan perfecto como parece.

Ya ha alcanzado su peso ideal, tiene la vida estabilizada como productora de un programa de televisión, y ahora, a sus 43 años, se queda embarazada. Si bien es cierto que, según los expertos, la tasa de fertilidad a partir de los 40 desciende hasta solo el 5% (un 10% en el caso de tratamientos in vitro), cada vez más mujeres son madres tardías. 

Por mucho que te intente convencer tu madre de lo genial que es reunir a toda la familia y por mucho que tus compañeros de trabajo estén entusiasmados por salir todos juntos a comer y desmadrarse, las fiestas navideñas son uno de los momentos más embarazosos del año. Siempre hay un cuñado que hace un comentario inoportuno y un colega que bebe más de la cuenta y que te hace pensar "trágame tierra". Cada vez que estés en ese momento 'me-quiero-morir', acuérdate de Bridget Jones y piensa que todo puede ser mucho peor.

No siempre hay que llevar la lencería más mona cuando por fin has quedado con el chico que deseabas. Esto lo tiene muy claro Bridget: es en esos momentos cuando hay que sacar la artillería pesada y elegir la mítica braga-faja. "Las oportunidades de alcanzar el momento crucial se incrementan enormemente si llevamos las bragas-faja tan famosas en las abuelas del mundo entero". Pues tomamos nota, amiga.

En la época de la primera Bridget Jones, era el periódico lo que había que leer, pero hoy en día con echar un vistazo a las noticias estarás preparada para integrarte en cualquier conversación que pueda surgir (no como le pasaba a ella). También puedes hacerte la experta en algo y arriesgarte a meter la pata, algo que también le sucedía a nuestra protagonista, pero nunca está de más leer los titulares por si acaso, aunque sea los meteorológicos, que sabes que siempre dan para un buen rato de charla.

Ya, es difícil decirlo en esta sociedad, pero si algo nos ha enseñado la evolución física de estos 15 años de Bridget Jones es que, cuanto menos te obsesionas, más fácil es alcanzar el peso ideal. El personaje luce estupenda a los 43, sin los kilos de antaño pero tampoco extremadamente delgada y lejos de aquella treintañera que se subía a la báscula todo el rato, que anotaba su peso en su diario y que oscilaba entre comer apio o atiborrarse con todo lo que pillaba. 

Bridget tiene un ejército de amigos dispuestos a consolarla en sus despechos amorosos. Con ellos queda, se desahoga y se emborracha hasta olvidar. Pero, además, ella pide ayuda en todos los momentos en los que los necesita, tanto para conseguir una noticia exclusiva como para encajar en un vestido, así que nunca está de más tener en cuenta que la colaboración es el mejor camino para tener éxito en algo.