Empecemos con algunas de las estadísticas más abrumadoras que, desgraciadamente, conocemos:
- En lo que llevamos de año han fallecido 21 mujeres a causa de la violencia machista.
- En los últimos 4 años, 166 menores se han quedado huérfanos de madre por la violencia de género.
- Anualmente, las españolas reciben de media un sueldo 7.750 euros inferior al de un hombre por hacer el mismo trabajo.
- La brecha salarial es, exactamente, del 24%.
- Los contratos a tiempo parcial se realizan, en un 73% de los casos, a mujeres.
- La brecha de género en las pensiones es del 34%.
- Las españolas en cargos ejecutivos ganan un 16% menos que los hombres.
- La tasa de paro de las mujeres es del 20,25%, tres puntos por encima de la de los hombres, la diferencia más alta de la última década –a pesar de la cacareada recuperación económica–.
- Las excedencias para cuidar a hijos e hijas siguen siendo tomadas por las mujeres en un 93,4% de los casos.
- La Real Academia de la Lengua sigue utilizando este tipo de definiciones (aunque ha anunciado que las va a matizar en su versión digital):
Son solo diez datos reales de la situación de la mujer en nuestro país, donde aún queda mucho trabajo para lograr la plena igualdad con el hombre y el pleno respeto de todos sus derechos. Por ello, diversas asociaciones feministas y confederaciones sindicales se han unido al Paro Internacional de Mujeres, convocado a nivel mundial para mañana, 8 de marzo, por el movimiento argentino Ni Una Menos.
Más de cincuenta países se unirán a una protesta que no tiene una convocatoria común ni siquiera dentro de España (cada asociación feminista tiene su propio calendario según cada ciudad, puedes verlos todos aquí). Madrid y Barcelona coinciden en establecer un paro de 12:00 a 12:30 horas, un paro no solo a nivel laboral, sino también de cuidados y de consumo –especialmente a aquellas marcas que han utilizado estrategias publicitarias machistas–.
Por la tarde, el Movimiento Feminista de Madrid ha convocado una manifestacióna las 19 horas, desde Cibeles a plaza de España, mientras que en Barcelona también se celebrará una concentración a la misma hora en la Plaça Universitat, organizada por Comissió Unitària pel 8 de març.
Además de secundar el paro, las asociaciones proponen otros tipos de protesta, como paralizar todo el día la realización de tareas domésticas o llevar una prenda de color violeta o negro, los tonos asociados con la lucha por la mujer y en solidaridad contra la violencia de género.
Objetivos de este paro
Si quiere dar un paso más en la reivindicación, puedes unirte a los paros parciales convocados por la Confederación Intersindical, que propone parar en tus tareas (laborales en cualquier turno o en tu hogar) de 12 a 14 horas, de 18 a 20 horas y de 21 a 23 horas. Estos son los objetivos del paro, según esta entidad:
a) La mejora de las condiciones laborales de las mujeres y el fin de la desigualdad laboral mediante la consecución de la supresión de la brecha salarial, el techo de cristal para promocionar, y la desigualdad en las pensiones.
b) La promoción de la conciliación de la vida familiar y personal.
c) La desaparición de la discriminación en el acceso al empleo y la disminución de la tasa de paro de mujeres.
d) La lucha efectiva contra las situaciones de acoso sexual en el ámbito laboral, la precariedad laboral y la alta tasa de contratos con jornadas parciales y de corta duración.
e) Se exige asimismo al Gobierno del Estado que desarrolle y acuerde con los grupos de la oposición, colectivos feministas y agentes sociales, las medidas para erradicar las violencias hacia las mujeres y a su vez sea considerado cuestión de Estado.
Por su parte, la Organización de Mujeres de esta confederación apunta otras reivindicaciones más: "El acceso gratuito a la atención médica (incluyendo los derechosreproductivos), el establecimiento y aplicación de graves sanciones ante todo tipo de violencias hacia las mujeres, por la laicidad de nuestros estados, y por defender nuestros derechos humanos". En definitiva, que se nos visibilice.
¿De dónde surge la idea?
Todo se empezó a forjar el pasado mes de octubre, cuando las mujeres polacas hicieron una huelga de un día siguiendo el viejo ejemplo de Islandia, donde en 1975 se convocó un paro nacional femenino. Las polacas consiguieron echar atrás una ley en la que se penalizaba el aborto y, animadas por ese éxito, colectivos latinoamericanos decidieron seguir su ejemplo y protestar con estos paros intermitentes por una situación intolerable de violencia de género (en Argentina, por ejemplo, cada 30 horas mueres asesinada una mujer).
Se hicieron contactos entre diversas asociaciones de todo el planeta, que vieron la necesidad de organizar un gran paro internacional y lo fijaron para el 8 de marzo. El siguiente gran paso se dio hace poco más de mes en Washington, con la marcha de mujeres que protestaban contra las políticas y los comentarios misóginos del presidente Donald Trump.
El Día de la Mujer se celebra cada 8 de marzo desde hace más de 100 años. Rinde homenaje al incidente sucedido el 8 de marzo de 1908, cuando las trabajadoras de Cotton, una fábrica textil de Nueva York, se declararon en huelga contra las condiciones infames de su trabajo. El dueño no aceptó el paro y las mujeres se encerraron en la fábrica. Acto seguido, el patrón cerró las puertas y prendió fuego al edificio: perecieron las 129 obreras que había dentro.
Y aquí se acaba el artículo. Porque #NosotrasParamos.
