Es, probablemente, una de las frases más duras que se le pueden decir a una mujer que ha sido violada. Y, desgraciadamente, una de las que más se pronuncia: '¿Qué llevabas puesto?'. Como si la ropa justificara la agresión sexual.
Ahora, una exposición que se celebra hasta este domingo en el Centre Communnautaire Maritime de Molenbeek (Bélgica) nos invita a reflexionar bajo este prisma. '¿Qué llevabas ese día?' es el título de una muestra que quiere, en primer lugar, desmitificar el hecho de que la víctima pueda tener alguna culpa.
La muestra exhibe 18 conjuntos de ropa que vestían las víctimas de violencia sexual en el momento de la agresión junto con unos papeles en los que describen cómo fue el ataque. Los 18 conjuntos proceden de mujeres y hombres (sí, hay un conjunto masculino) en la Universidad de Kansas, donde se celebró la misma exposición el pasado mes de septiembre.
Entre las prendas, hay pijamas, vestidos, camisas, y pantalones. Una sudadera. Una falda. Nada anormal. Los organizadores de la muestra, que surgió al hilo del movimiento internacional #MeToo contra el abuso sexual, insisten en que, con ella, quieren que se dejen de atribuir responsabilidades a las víctimas de violaciones.
"Con esta exposición, queremos romper los esterotipos sobre la cultura de la violación", explicó a Quarzy Yasmina El Moutouk, responsable de los servicios sociales de Molenbeek. "Todos tenemos vaqueros y camisetas en el armario y, lo más importante de todo, es que somos libres para llevar lo que queramos".
"La pregunta '¿Qué llevabas ese día?' es una pregunta universal, se formula en todas partes", añadió El Moutouk. "Para nosotros, es importante recordar a la gente que es una pregunta que no sirve para nada y que, además, hace daño a las víctimas".
