A estas alturas pocos son ya los que no han amenizado una tarde de manta y sofá con un maratón de 'Big Little Lies'. Después de arrasar en los Globos de Oro haciéndose con cuatro galardones, la serie que narra los problemas cotidianos de cuatro mujeres definitivamente hará historia. Y no sólo por atreverse a alzar la voz y arrojar luz, de alguna manera, sobre temas tan controvertidos como el maltrato o el abandono.

La segunda temporada, además de pasar el testigo de la dirección a manos de una mujer, Andrea Arnold, también subirá considerablemente el sueldo a su elenco de actrices, algo poco (o nada) común en el Hollywood de hoy en día. Hecho que, por supuesto, se debe al descontrolado éxito que ya ha ganado entre los seriéfilos.

Tal y como ha afirmado Hollywood Reporter, Nicole Kidman y Reese Witherspoon, protagonistas de la serie, cobrarán un millón de dólares por episodio, cuadriplicando los 250.000 dólares por capítulo que ganaba cada una en la primera temporada. Por su parte, otras actrices secundarias, como Zoe Kravitz o Shailene Woodley, también obtendrán un aumento de sueldo muy considerable, aunque, por el momento la cantidad exacta sigue siendo un misterio.

Pero este cambio en las nóminas de las actrices (sin contar, en el caso de Kidman y Witherspoon, con su sueldo como productoras ejecutivas) podría no sólo darse por haberse convertido en la serie del momento para crítica y audiencia. Además de que el éxito recolectado hizo llegar una segunda temporada que no estaba planeada, con la consiguiente oportunidad para una negociación de salario, este aumento podría deberse, de alguna manera, al contrato de Reese y Apple. La actriz habría cobrado más de 1,25 millones de dólares por episodio por protagonizar el nuevo drama de la productora.