Es, según la revista Forbes, una de las mujeres más poderosas del mundo. Su lucha para cuidar el planeta es su causa estrella.
¿Trabajas activamente con alguna organización?
Desde que visité una tribu indígena en Brasil, mi país, en 2004, empecé a tomar conciencia de los problemas de deforestación y polución de agua que hay en todo ese territorio. En 2009 tuve el honor de ser invitada a colaborar en
el United Nations Environment Programme (unep.org) como su embajadora.
¿Qué tipo de cosas haces cotidianamente para dar ejemplo a los demás?
Intento gastar poca agua cuando friego los platos, me lavo los dientes o me ducho. En casa reciclamos todo y somos muy conscientes del gasto energético que solemos hacer.
¿En qué proyectos estás involucrada ahora mismo?
Este año me he sumado
a la campaña Think. Eat. Save (Piensa. Aliméntate. Ahorra) (thinkeatsave.org) de la UNEP Y FAO, que busca reducir la cantidad de comida que se malgasta.