La envidia es un sentimiento o estado mental en el cual nos sentimos mal por no poseer lo que tiene otro. Es una emoción muy común, que si se observa y estudia, se puede utilizar de forma positiva para conocerse a uno mismo y desarrollarse como persona. Hablamos con Irina de la Flor, coach y directora del proyecto 'Lo mejor de mi' de la Fundación Vivo Sano, para aprender a gestionarla y vivir más contentos con lo que tenemos.

En un primer lugar nos dice que desear tener algo es perfectamente normal, y que no progresaríamos en la vida si no deseáramos ciertas cosas. El problema es hasta donde llegamos a desear algo, porque la envidia puede llegar a ser muy negativa para nuestra autoestima y para nuestra salud mental.

Nada más nacer empezamos a querer cosas, ya durante los primeros meses de vida queremos miramos con ojos golosos cómo a nuestro alrededor hay objetos con los que queremos jugar o llevarnos a la boca, y según vamos creciendo nuestros deseos van en aumento empezamos a querer caminar como el resto, a jugar con nuestros amigos o a tener una bicicleta nueva. En ocasiones nuestros deseos se hacen realidad, pero muchas otras no es así. Durante la infancia o la adolescencia es perfectamente normal que sintamos de envidia, ya que forma parte del desarrollo personal en el que necesitamos entender cómo funciona la vida y comprender que en nuestra vida no podemos tener todo.

Sin embargo la cosa cambia a medida que crecemos. Es fundamental querer conseguir cosas y tener aspiraciones en la vida, pero no podemos dejar que la envidia hacia los demás se apodere de nosotros porque terminaremos frustrados y con la autoestima por los suelos.

Una de las características más interesantes de la envidia y un modo muy sencillo de eliminarla es observar qué dice nuestra mente cuando la sentimos, y escucharla: ¿Qué estamos pensando realmente?, ¿Qué implicaciones tiene lo que dice nuestra cabeza? ¿Nuestra cabeza habla de la persona que tiene la cosa que yo no poseo, o en realidad estamos hablando de nosotros mismos?

Para que sepamos si la envidia está afectándonos en nuestro día a día, Irina nos hace una descripción con los aspectos destacables de una persona envidiosa

- Necesita trabajar su madurez emocional

- Está identificada con creencias que limitan su potencial (en algún lugar su mente dice "Envidio a esa persona porque eso que tiene yo no lo puedo conseguir, yo no me lo merezco, o yo no valgo suficiente para tenerlo")

- Se centra en la crítica externa o hace comentarios negativos de la persona que posee aquello deseado

- Tiene una baja autoestima y una auto-imagen incorrecta

- Tiene un bajo conocimiento personal, es decir, esa persona realmente no se conoce bien y no conoce sus capacidades

- Se deja llevar por los pensamientos negativos de su mente

- No tiene mucho control sobre su mente

Para poder trabajar estas carencias la coach del proyecto 'Lo mejor de mi' nos da unos consejos que podemos aplicar para lograr disminuir la envidia que sentimos:

  1. Trabaja tu autoestima conociéndote mejor. Lee un libro de autoconocimiento o haz un curso de inteligencia emocional. El ser más conscientes de nuestras cualidades hace que estemos más satisfechas con nosotras mismas, y automáticamente la envidia disminuye.
  2. Trabaja con afirmaciones positivas diarias, reforzando tus puntos más fuertes. Todo sentimiento está unido siempre a un pensamiento. Por ejemplo: "Me esfuerzo a diario por ser mejor persona cada día"
  3. Evita la rumiación mental y deja ir los pensamientos negativos. Cada vez que te vengan pensamientos de envidia, haz tres respiraciones profundas y déjalos pasar. No juzgues esos pensamientos o sentimientos; es todo normal, simplemente, déjalos ir.
  4. Intenta averiguar el verdadero motivo de tu envidia. Muchas veces la envidia es un pozo de insatisfacción del que se van enganchando cosas rotatorias. Se consigue una y aparece otra automáticamente porque no son la causa última de la insatisfacción, son solo pantallas.
  5. Comienza un curso de meditación o de mindfulness. Te ayudarán a vivir desde un estado de serenidad lejos del ruidoso mundo de los pensamientos y aumentar el control que tenemos sobre nuestra vida.
  6. Comienza una actividad creativa una vez a la semana para explorar y desarrollar tu mundo interior: cerámica, pintura, diseño, baile etc. Esto hará que aumente tu satisfacción personal y disminuirán los sentimientos negativos.
  7. Ten más contacto con la naturaleza haciendo una excursión a la semana. Esto te hará aumentar la relajación y disminuir la crítica y los pensamientos negativos y disfrutar de las maravillas de la vida
  8. Permítete disfrutar de lo que tienes. Muchas veces no se envidia una cualidad o situación, sino el bienestar que presuponemos en la persona que la tiene. Intenta encontrar tú ese bienestar en tu vida actual. Haz una lista de las 10 cosas que ya tienes y que te hacen feliz.
  9. Haz algún tipo de actividad física o ejercicio físico al menos dos horas a la semana para aumentar las endorfinas y traer equilibrio mente-cuerpo.
  10. Realiza alguna actividad de voluntariado. Ayudar a los demás regularmente es el mejor antídoto para la baja auto-estima.