¿Quién no se ha sentido triste alguna vez en su vida? ¿Quién no ha experimentado en algún momento los síntomas de lo que podría ser una depresión? En contra a lo que se suele decir de que los españoles estamos todo el rato felices, contentos, de juerga y que no hay quien nos pare, el I Estudio sobre el Estado de Ánimo de los Españoles que se ha presentado hoy ofrece unos datos incontestables: a pesar de que el 83% de los españoles dice ser feliz en su día a día, casi 8 millones de personas confiesan sentirse tristes.

La empresa Feebbo es la autora de este informe, que indaga en esta 'tristeza nacional': entre todos los españoles que reconocen no estar felices, la mitad se declara cansada; un 20%, deprimidos, y un 15% tristes. Estas mismas personas, además, afirman pasar entre 3 y 4 días de bajón cada semana. Los bajones, en todo caso, afectan a un 75% de la población entrevistada, que asegura tener al menos uno por semana.

Es curioso que un 60% de los entrevistados declaran estar más triste de lo que pensaban tras parars a pensar sobre su estado de ánimo. Pero, ¿cuáles son las razones? Por este orden, nos desmotiva la rutina (41%), seguido de poco tiempo para el ocio (15%) y estar en el paro (13%), sin olvidar que un 71% reconoce que su ánimo también fluctúa con la meteorología.

Parece ser que vivir fuera de núcleos urbanos contribuye a ser algo más feliz, pero en el caso de los habitantes de playa o montaña (un 40%) no tienen con quién desahogarse en los bajones. El 35% de los solteros tampoco acude a nadie, algo que le ocurre al 60% de los españoles que se declaran tristes.

Sin embargo, el estudio demuestra que el 36% de los españolas pide ayuda a su pareja para aliviar sus bajones emocionales, pero hay un 30% de la población de nuestro país (casi 14 millones de personas) que no acude absolutamente a nadie e intentan superar sin ayuda de ningún tipo este tipo de baches en nuestro estado de ánimo.

Por último, el informe desvela que los tres principales factores para que los españoles estén tristes son la economía (65%), el trabajo (47%) y la familia (31%), factores que son diferentes según el sexo: a los hombres les preocupan más los problemas laborales mientras que las mujeres achacan su tristeza a crisis emocionales.