Se calcula que un 67% de los españoles no duerme las suficientes horas al día y un estudio reciente ha mostrado que nuestra forma de ser podría tener algo que ver con este déficit de sueño.

Se sabe que factores como el estrés o los estímulos externos contribuyen a desencadenar episodios de insomnio, pero un estudio reciente ha ido más allá y ha concluido que las personas introvertidas son también las que presentan más dificultades a la hora dormir.

Introvertidos vs extrovertidos

En general, las personas extrovertidas se interesan más por todo aquello que les rodea y suelen ser personas francas y claras. Por el contrario, los introvertidos se centran más en su 'mundo interior' y son personas que destacan por su tranquilidad. Para llevar a cabo el estudio, un equipo de investigadores norteamericanos contó con la participación de 1.000 voluntarios que fueron sometidos a un test de personalidad. Una vez finalizado el test, se les preguntó cómo dormían y con qué soñaban.

Según los datos recopilados por los investigadores, las personas extrovertidas objeto del estudio resultaron ser más propensas a dormir toda la noche sin despertarse y, en consecuencia, se encontraban más descansadas (hasta un 17,7%) durante el día. Por su parte, entre los introvertidos era más habitual tener sueños pesados (como soñar con perder los dientes) que entre los extrovertidos. Además, también se descubrió que las personas introvertidas suelen acabar durmiéndose cuando quieren permanecer despiertos en mayor medida que las personas extrovertidas. El informe final dice:

"Las personas introvertidas solían tener sueños relacionados con su incapacidad para influir en el mundo que les rodea. Las personas extrovertidas, sin embargo, soñaban con todo tipo de actividades, como, por ejemplo, viajar. Aquellos que se guiaban más por la intuición (los introvertidos) tuvieron un mayor número de sueños en los que experimentaban diferentes tipos de amenaza, como ser atacados o incluso asesinados. De hecho, este tipo de personas soñaba con mayor frecuencia que aquellas que se guían por los sentidos (los extrovertidos) y cuya personalidad demuestra una resistencia instintiva a todo lo que tenga que ver con la fantasía".

Cualquiera que haya tenido una pesadilla sabe cómo ésta afecta a la calidad del sueño y cómo a la mañana siguiente se tiene la sensación de no haber descansado, por lo que estos resultados resultan muy interesantes en este sentido y nos demuestran que el sueño es un proceso muy complejo. El equipo llegó a la conclusión de que:

"Nuestro estudio no puede dar una respuesta clara a todas estas preguntas, pero proporciona las herramientas necesarias para poner en marcha nuestra autoexploración. Tal vez así podamos saber si nuestros deseos coinciden o no con los de nuestro subconsciente".

Los investigadores también señalaron que "independientemente de cuál sea nuestro tipo de personalidad, todos tenemos nuestras propias virtudes y retos que superar. Ningún tipo de personalidad es mejor que otro. Analizar estas diferencias permitirá comprendernos mejor mutuamente".

Vía: Netdoctor