No es la primera vez que ocurre. Ya desfilaron en París en 2011 tras cancelar su cita en Nueva York. En la siguiente edición volvieron a la Gran Manzana.

Desde el lanzamiento de The Row en 2006, las Olsen han construido en un negocio que ha ido creciendo como la espuma, cuentan ya con 164 puntos de distribución en 37 países. Además, hace unos meses la indutria de la moda norteamericana les concedió su mayor galardón, el premio CFDA en la categoría de mejor diseñador de ropa femenina.

La firma, además de las colecciones pret à porter, han puesto en marcha una colección de bolsos y zapatos con las que esperan arrasar aún más.

La 'mudanza' de las Olsen a París no es el único cambio para ellas. La semana pasada se revelaron sus planes de empezar a desarrollar ellas mismas su segunda etiqueta 'Elizabeth&James' por primera vez desde que fue lanzado en 2007.