Nada menos que 3.500 metros cuadrados de tienda, en el 666 de la Quinta Avenida de Nueva York. Así, por todo lo alto, inaugurará mañana Zara su flagship store. Un local espectacular donde se ha cuidado hasta el más mínimo detalle y donde apetece comprárselo todo.

Su distribución en corners, más próxima al concepto de boutique que de megatienda, una iluminación dirigida con leds que hace "levitar" las prendas (en palabras de la arquitecta gallega responsable del proyecto, Elsa Urquijo) y la colocación estratégica de la ropa, que consigue presentar los looks de modo impecable, obran el milagro.

Pero es que, además, de sus perchas cuelga una de las colecciones más jugosas de las últimas temporadas. Tonos pastel, vestidos glam, remates de tachuela y estampados pañuelo se declinan de un modo tan apetitoso aquí que apetece apuntar a todo y desenfundar velozmente la visa.

Aquí es todo Zara, pero más y mejor. Tal y como dice el director de la compañía, Pablo Isla, "es una imagen totalmente Zara, totalmente renovada". La ropa que se puede ver en tienda es la misma que en España.

Joint, Black, Mannequin, Knee, Teal, Display device, Tights, Active pants, Balance, Ankle, pinterest

El único guiño que se han permitido es la edición limitada y conmemorativa de algunos accesorios exclusivos para mujer y una colección cápsula para hombre (elaborada con tejidos top como el cashmere, la seda y el mejor algodón, y en la que destacan los zapatos italianos hechos a mano en Italia). Los precios, eso sí, son de un veinte a un treinta por ciento más caros en EE.UU. que en España.

La nueva tienda, emplazada en el edificio Tishman de la Gran Manzana, supone además todo un hito para el propio mundo Inditex. Por emplazamiento, por dimensiones, por filosofía empresarial (un ejemplo es que el espacio es una adquisición y no un alquiler, como suele ser habitual en el grupo) y por espacio arquitectónico.

Sus tres plantas combinan una decoración luminosa donde priman el mix de blanco y negro, las líneas suaves, las texturas como el algodón y el lino y las maderas cubiertas con resina. Todo empaquetado con la etiqueta más ecofriendly.

De hecho, la firma está trabajando en consonancia con los estándares de la certificación medioambiental Leed y desde el año pasado tiene en marcha el Plan Inditex Sostenible 2011-2015, que contempla la implantación progresiva de medidas como la reducción de consumo de energía y agua, el reiclaje, la utilización de mobiliario PEFC, etc.

Y eso no es todo: esta noche, los cinco escaparates de Zara en la esquina de la Quinta con la 52 prometen iluminarse para acoger a lo más cool del mundo arty neoyorquino, mientras la otra tienda de Zara, situada a tan sólo unas zancadas más arriba, echa el cierre definitivamente. A partir del próximo agosto será la sede del aterrizaje de Massimo Dutti en NYC.

Bye, bye, Zara... Y welcome ZARA!

Footwear, Product, Yellow, High heels, Fashion, Tan, Beige, Still life photography, Material property, Sandal, pinterest

*Modelos diseñados con motivo de la apertura de la tienda.