'Sin prejuicios, etiquetas ni ideas preconcebidas', esa es una de las reglas fundamentales que conoces nada más entrar en Dama de Copas (C/Goya, 64).
Al principio es complicado creérselo, sobre todo si has tenido repetidas veces la frustrante sensación de que tu pecho, por el motivo que sea, no encaja en las tiendas convencionales.
Los problemas son varios cuando ocurre esto; además de sentirte 'un bicho raro', las opciones para adquirir el sujetador o la lencería deseada resultan más que reducidas, caras y se limitan a ser simplemente funcionales, olvidando atender una parte tan fundamental como la sujeción o el confort: que te sientas sexy y atractiva desde dentro, cualquiera que sea tu pecho.
Dama de Copas es especial por multitud de motivos, entre ellos por sus más de cien tallas en todos los contornos y copas de la A a la JJ, porque adaptan todos los sujetadores para la lactancia materna y también para mastectomías (además de vender las prótesis necesarias por un precio muy asequible), por la gran calidad de sus sujetadores deportivos, por su orientación individualizada... Un verdadero descubrimiento.
El funcionamiento de la firma se basa en el 'Bra Fitting', un asesoramiento obligatorio individual y personalizado por una especialista. Nunca te van a dar el sujetador de la talla que crees que tienes, sino que van a evaluarte (no a juzgarte), a preguntarte lo que estás buscando y cuáles son tus gustos. A partir de ahí, todo va sólo.
La asesora -todas son encantadoras- te hará sentir más que cómoda y lo que posiblemente te daba terror en el pasado, la búsqueda el 'santo sujetador-grial', se transforma en un rato divertido con final feliz.
Un consejo: estáte abierta a probarte las piezas o los modelos que te aconsejen porque quizás descubras cosas nuevas que te favorecen mucho más de lo que hubieras imaginado.
No suelen comentarte la talla que tienes de primeras, porque ésta puede variar en función del fabricante, el tejido o el modelo.
Una mujer puede llegar a tener hasta 5 tallas diferentes dentro de una misma marca. Y además, el tamaño y la forma de los senos varían en cinco momentos durante la vida de una mujer.
No se puede comprar lencería sin probársela antes, por eso las compras online se descartan en tu primera compra, aunque es posible hacer un pedido por Internet contactando primero con tu asesora vía email o por teléfono cuando ya has sido orientada y tienes ficha en la tienda.
Precisamente esta ficha personal es otra de las grandes ventajas: todo lo que te hayas comprado o probado, con tus gustos y medidas, queda registrado con el fin de que, si alguien quiere regalarte alguna prenda, sólo tiene que dar tu número de teléfono y una especialista podrá guiarle para que elija la que mejor encaje contigo.
Este registro sirve también para recibir futuras promociones y descuentos en los sujetadores que te has probado y no te llevaste por alguna razón.
Y eso no es todo: vas a aprender cómo deben quedarte los tirantes, a qué altura de la espalda debe situarse el contorno, hasta dónde debe llegar la copa y dónde comienza tu pecho, la proyección correcta que deben tener las mamas dentro del sujetador, en qué corchete abrochártelo, qué tipo de escote te favorece, etc.
Una de las cosas más bonitas en cuanto a su filosofía es que no tienen sujetadores reductores, quieren que cada mujer se acepte y se quiera como es. Que se sienta guapa en cualquier talla, si va a ser madre, lo ha sido, está dando el pecho, ha pasado un un cáncer, tiene un pecho muy pequeño, ha cogido peso, se le ha descolgado, lo que sea.
Dama de Copas regala a todas las mujeres la posibilidad de sentirse y verse atractivas en ropa interior, que al fin y al cabo, es un derecho que tenemos todas.
¿Precio? Desde 39€.
¿Dónde? En C/ Goya, 64 (Madrid), en Lisboa y Oporto.
¿Facebook? Dama de Copas España. ¿Instagram? @damadecopasmadrid
