La diseñadora se ha inspirado para su colección en el imperio austro húngaro, dando de nuevo el protagonismo absoluto al corsé, pieza fetiche de su firma. Pieles, bordados, telas brocadas, y originales estampados que recrean las pinturas de palacios e iglesias austriacas. Como novedad ha integrado la lana en sus propuestas y un tejido de efecto madera. Sin duda la pieza estrella del desfile ha sido increíble corsé-joya formado por 600 piezas Swarovski y elementos de cristal transparente que ha cerrado el desfile.