La diseñadora se inspira en el sur de España reinterpretando los volantes, lunares y flecos en una colección marcada por el blanco y negro, destaca también por los bordados y costuras artesanales en organzas de seda, gazar, alpacas y lanas. Los cortes rectos se ajustan a la silueta femenina ayudados por toreras, hombreras marcadas, estampados de lunares en un claro homenaje a nuestro país.