La diseñadora ha sorprendido con Cannibal, una colección atrevida, llena de colores intensos. Nos han encantado los estampados de animales y ese aire salvaje de algunas propuestas de inspiración africana: monos, linces, máscaras tribales... La parte final del desfile ha sido completamente distinta con una apuesta por vestidos de fiesta con toques glitter en oro y plata con lentejuelas. Para terminar, una serie de vestidos muy ceñidos con formas geométricas tipo tablero de backgammon.