Bajo la bóveda celeste Marina Conde muestra piezas muy femeninas impresas con estrellas, faldas de encaje acompañadas de chaquetas de corte militar, tejidos como el lúrex o cuero metalizado que contrasta con la gasa o el chantilly, y un maquillaje que nos traslada a otro satélite. Una mujer ligera, sensual y con un halo mágico que se fusiona con el alma guerrera.