Dentro de su vida de súper estrella, Beyoncé también tiene tiempo para empezar a tener sus primeros planes solo de chicas con su hija mayor Blue Ivy. La pequeña, de 6 años, ya se está haciendo su propio nombre en el mundo de la fama con gestos tan divertidos como el que protagonizó junto a sus progenitores en la última gala de los Grammy.
En su tarde juntas, madre e hija se fueron al partido de baloncesto entre las estrellas de la NBA en el que se enfrentaron el Team Curry y el Team Lebron en Los Angeles. ¿Y qué hicieron? Pues lo que haría cualquier madre con su hija: hacerse 'selfies sin parar.
Blue Ivy probó a hacer algunas muecas.
Pero parece que el resultado no le convenció mucho.
Pero esta cita en realidad fue de tres, porque junto a ellas también estaba la madre Beyoncé, Tina Knowles.
Tratándose de Beyoncé, ir con unos vaqueros y un par de zapatillas no era una opción. Por eso la vimos con una falda asimétrica amarilla de Jacquemus, unos botines transparentes de Gianvito Rossi y unas gafas de sol de Gentle Monster. Su hija no se quedó atrás y lució un bolso de Louis Vuitton. Tan sencillas como siempre.