La diseñadora británica Stella McCartney está en racha. En 2012 vistió a la delegación inglesa en los Juegos Olímpicos, y en noviembre de ese mismo año recibió los premios a ‘Diseñador del año’ y ‘Marca de diseñador del año’. Su último reconocimiento ha sido la Orden del Imperio Británico.

La Reina de Inglaterra le entregó la condecoración hoy en el Palacio de Buckingham por sus servicios a la industria de la moda. Stella, de 41 años, acudió acompañada por su marido, Alasdhair Willis.

Para la ocasión, la hija de Paul McCartney, eligió uno de sus diseños, un traje de falda en azul marino con salones de terciopelo también creados por ella misma. Remató el look con un tocado vintage de Cartier. Su marido lució un traje a juego con el de su mujer.