"Has engordado, has adelgazado, tienes más culo, tienes menos pecho..." Las mujeres estamos expuestas por una extraña razón social a críticas hacia nuestro físico.

Parece que es lícito comentar en voz alta los cambios físicos de la otra persona en alto, y machacar con frases lapidarias.

"Es que yo soy muy sincero/a, no tengo filtros", ésta es la frase que se escucha de boca de esas personas que se atreven a decir sin ningún miramiento ciertas opiniones sobre el cuerpo de los demás, a la cara. Por que sí.

Clothing, Human, Dress, Shoulder, Shoe, Red, Joint, Flooring, One-piece garment, Style, pinterest

Esa ola 'sincericida' se escuda en una honestidad legítima, y quedarte fuera de esa onda te "convierte" en alguien que no dice la verdad. Además.

Todos somos conscientes de cómo somos, de si hemos engordado o adelgazado, de si estamos calvos, somos bajos, altos, tenemos un grano en la frente o mala cara. No hace falta que venga nadie a decírnoslo. No sirve para nada, aparte de para hacer sentir mal. Es verdad, para eso sí que sirve.

Una opinión (siempre que se te pida) puede ser sincera, con respeto y con cariño. Sí, con filtro. Ese que existe para empatizar con la persona de delante y no herirla sin necesidad alguna, escoger las palabras adecuadas.

De esto tampoco se libran las modelos de pasarela. Las más juzgadas duramente cada vez que tienen un cambio físico. Tampoco se salvan de esto las modelos de tallas grandes, o las conocidas como 'curvies' (por cierto, la gran mayoría odia esa palabra).

ROBYN LAWLEY, LA ÚLTIMA OFENDIDA

¿Eres modelo de talla grande? Entonces no se "puede consentir" que con el paso del tiempo pierdas peso, hagas deporte o tu cuerpo cambie. Cada vez que alguna de ellas pierde peso, poco le falta al público para llamarlas traicioneras.

Esto lo ha vivido Ashley Graham en la gala del MET, Tara Lynn, y ahora es el turno de Robyn Lawley.

Una modelo que se la clasifica en 'curvy' únicamente por medir 1,89. Claro, si tuviese una talla 36 con esa altura no podría sostenerse en pie.

Todo su enfado ha ocurrido cuando el Daily Mail de Australia la 'acusaba' de haber aparecido extremadamente delgada en el photocall de una premiere que se supone que apoya el 'body postive'. Parece que siguen sin entender que esta corriente se basa en la diversidad de cuerpos y en su aceptación.

instagramView full post on Instagram

La modelo ponía este mensaje en su Instagram Stories: "¿De verdad? El vestido que llevo aquí es la misma talla que uso desde hace cinco años #fuckoff".

Y la pregunta es la siguiente, ¿hasta cuándo vamos a tener que seguir justificándonos sobre cómo somos o no somos?