Hace tan sólo unos días, el reconocido The New York Times sacaba a relucir uno de los escándalos más sonados jamás vistos en la historia de Hollywood. El famoso productor de cine Harvey Weinstein ha sido acusado de abusos y acosos sexuales realizados durante décadas a actrices y compañeras de profesión, entre las que se encuentran rostros tan conocidos como Ashley Judd, Rose McGowan, la modelo italiana Ambra Battilana o la actriz Asia Argento, unas de las últimas en denunciarle.

Ante tal revuelo, como podréis imaginar, las posiciones han sido diversas. Entre ellas, en este camino de rumores, acusaciones y confirmaciones, se han encontrando, al mismo tiempo, tanto detractores que condenan la figura de Weinstein (en su mayoría), como son Meryl Streep, Brie Larson o Lena Dunham, y otros, como Donna Karan, que con sus declaraciones no han hecho más que salir en su defensa.

Pero ahora, cuando parecía que tras la tempestad llegaba la calma y que todo tocaba su fin, dos de los rostros más conocidos del panorama celebrity se unen a esta lista interminable de denuncias: Angelina Jolie y Gwyneth Paltrow.

Ambas actrices han querido contar cómo vivieron esta experiencia con tan sólo 23 y 22 años, respectivamente, edades en las que ambas empezarían a lanzar su carrera hasta la cumbre.

Paltrow topó con Weinstein cuando éste le contrató para el papel protagonista en 'Emma', la adaptación de Jane Austen. Según se narra en el artículo, antes de comenzar el rodaje, el productor la citó para una reunión en la habitación de su hotel, tal y como acostumbraba a hacer con sus víctimas. Más tarde, según cuentan la actriz y otras denunciantes, esta estrategia acababa con tocamientos e insistencias para hacerse unos masajes.

"Era una niña, había firmado (el contrato), estaba petrificada", cuenta la actriz, quien también asegura que veía al cineasta como a un mentor. En aquel momento, Gwyneth se opuso a las proposiciones del productor y acudió a contárselo a Brad Pitt, su pareja por aquel entonces. El actor, por su parte, no dudó en plantarle cara a Harvey, ante lo que éste último reaccionó amenazando a Paltrow. "Pensé que me iba a despedir", asegura.

Por su parte, Angelina también sufrió en su propia piel una situación parecida, mientras se encontraba inmersa en la promoción de 'Jugando con el corazón', a raíz de la cual decidió no volver a trabajar con Harvey Weinstein: "Este comportamiento hacia las mujeres, en cualquier ámbito y en cualquier país, es inaceptable", aclara la actriz en su testimonio vía mail a The New York Times'.