Sin lugar a dudas, la gala MET es una de las noches más esperadas del año por muchas razones, pero sobre todo es una de las más aclamadas por los impactantes looks, tanto de moda como 'beauty', que lucen sus glamurosos invitados. La icónica alfombra roja del Metropolitan Museum of Art (MET) de Nueva York recogió anoche a cientos de los rostros más prestigiosos del mundo. Blake Lively, Sarah Jessica Parker, Rosalía... Pero la que realmente consiguió impactar con su apuesta de belleza esa fue la inigualable Kim Kardashian.
Como era de esperar, la empresaria y modelo se convirtió en una de las indiscutibles protagonistas de la noche. Ya dejó el listón muy alto con su apuesta en la primera celebración de la gala en septiembre cubierta totalmente de negro y, ahora, sorprende con un impactante cambio de look que no ha dejado indiferente a nadie. ¿Rubia platino? Kim deja atrás su característica melena negra para homenajear a la única e inigualable Marilyn Monroe.
No es la primera vez que la número uno del clan Kardashian tiñe su icónica melena, pero lo de esta vez nos ha sorprendido, y mucho. Con un rubio platino perfectamente peinado hacia atrás, la empresaria impactaba nada más pisar la alfombra roja con un notorio cambio de look que, estamos seguras, ha durado horas y horas de procesos de decoloración.
En particular, se trata del rubio 'Ivory', una tendencia actual para cabellos rubios de lo más favorecedora que arrasa cada vez más entre las expertas 'beauty'. Su tono lujoso a medio camino entre el blanco y el marfil lo hacen una apuesta segura lejana a los clásicos y cercana a las tendencias nórdicas.
Y aunque el color que lució si es un claro homenaje a la diva de Hollywood, el peinado no tiene nada que ver. Kim optó por un pequeño moño alto estilo bailarina que realzaba su espectacular maquillaje en tonos 'nude' con sombras marrones. Una decisión a la que, quizás, recurrió para que su nueva imagen no apagara al verdadero protagonista de su outfit. Su vestido.
El vestido de cristales de Kim Kardashian
Tal y como nos confirma Kim desde su cuenta personal de Instagram, el deslumbrante vestido de cristales que ha llevado durante esta esperada celebración es el mismo que llevó Marilyn Monroe en 1962. Concretamente, el que usó para cantar el 'Cumpleaños feliz' al presidente John F. Kennedy. "Gracias por darme la oportunidad de estrenar esta evocadora pieza de la historia de la moda por primera vez desde que la difunta Marilyn Monroe lo usó", declaraba la modelo en redes.
Se trata del vestido ceñido de tirantes en color 'nude' repleto de brillos y cristales, 6.000 en particular, cosidos a mano y diseñado por el modista Jean Louis. Su valor es muy elevado. Tanto que ha sido subastado en un gran número de ocasiones por millones y millones de dólares. Es por ello que Kim ha querido tener el máximo de cuidado con este, así si el vestido que lució en la alfombra roja es el original, lo cierto es que el que llevó después de subir las escaleras se trataba de una réplica exacta. Aunque parece que nadie se ha dado cuenta.
Además, cabe destacar que, como el diseño original fue cosido a medida para la estrella más mítica de Hollywood, Kim se vio sometida, durante las semanas previas a la gala, a ciertas actividades y dietas para lograr lucir el vestido sin necesidad de añadirle ni un solo retoque. Lo cual resulta increíble. ¿No está espectacular?
