Pasa el tiempo y los gustos cambian, la moda se transforma, las tendencias surgen, arrasan, mueren… Sin embargo, todas sabemos que hay cosas que perduran a lo largo de los años, como esa prenda atemporal que nunca sacarás de tu armario, ese rojo de labios que amarás para siempre o ese perfume que jamás te dejará de seducir. Puede que nos guste la novedad, pero nos rendimos ante las cosas que permanecen por su esencia, por la magia que transmiten y su alma auténtica.
Esto lo sabían muy bien los perfumistas Michel Almairac y Amandine Marie, creadores de Chloé Signature, una fragancia fresca y femenina que nacía en 2008 para cautivar a la mujer. Y vaya si lo hizo: el perfume, elegante pero también atrevido, se convirtió en todo un icono de la marca, y lleva desde entonces cautivando y enamorando gracias a su personalidad vibrante y única.
La felicidad, en el centro del universo
Clhoé Signature resume la esencia de un espíritu libre. Es elegante y cálido a la vez. Fresco, pero también seductor. Exquisito, sin perder naturalidad. Una perfecta combinación de matices que pueden parecer opuestos, pero que en realidad se complementan de maravilla, dando como resultado ese perfume que nos encanta y que llevaríamos siempre.
Nada más olerlo te sorprenden las notas florales de peonía, lichi y fresia, como una risa alegre y repentina. Después llega la rosa sensual, la verdadera protagonista de este aroma, con notas de magnolia y lirios del valle. El fondo del perfume deja ver un toque de madera de cedro con matices sutiles de ámbar. Una composición olfativa que explica, sin duda, la pasión que despierta esta fragancia, la felicidad que transmite y el modo audaz y chic en que hace sentir a quien lo lleva.
Desde la primera rosa a la última
Quizá por la atemporalidad de su fórmula, y por esa alegría y seguridad que transmite, Chloé Signature no le tiene miedo al cambio, tan enriquecedor y necesario. En ocasiones se reinventa para crecer e irradiar más luz y felicidad si cabe. Así surge Chloé Lumineuse, en el que la emblemática rosa aparece liberada, más potente y sensual que nunca. Podría ser el regalo de Navidad perfecto para cualquiera de esas mujeres importantes en tu vida, si no lo quisieras para ti.
La responsable de esta versión inaudita es la perfumista Ane Ayo, quien acompaña a la rosa con los acentos suaves y ricos del jazmín sambac y la vainilla. El resultado es cálido y brillante como el sol, y viene a confirmar lo que ya intuíamos: que desde que surgió el primer Chloé Signature, hasta hoy que nace el radiante Chloé Lumineuse, este perfume es uno de los que no pueden faltar en tu tocador.
El frasco de Chloé Signature surgió de la imaginación del diseñador Patrick Veillet y refleja esa combinación de belleza vibrante y elegancia que atesoran los diseños de la firma. Un envase cuadrado, con adornos delicados en el vidrio y un bello tapón ovalado.
El detalle especial lo pone la cinta cuya lazada, hecha a mano, es ya un símbolo de este perfume icónico. En el nuevo Chloé Lumineuse la cinta beige lleva un hilo rosa que la bordea delicadamente. Es el sumun de la belleza en un frasco que también se ha concebido pensando en el mundo real, necesariamente sostenible: parte del vidrio del frasco y la totalidad del poliéster de la cinta son reciclados. ¿Se puede pedir más?
4 razones para amar el nuevo perfume Chloé Lumineuse
