Las 15 plantas colgantes más bonitas para convertir tu casa en una jungla

Nos hemos quedado locas con esta planta porque no necesita una maceta para crecer y desarrollarse. Así, como lo lees. Son tan especiales que se pueden cultivar sobre piedras, cristales -si te gustan, no te pierdas nuestra guía de cómo decorar con piedras y cristales-, maderas, soportes metálicos... porque no desarrollan raíz. Además, son susceptibles de formar parte de composiciones artísticas muy decorativas.

Cómo colgar y cuidar la Tillandsia: dentro de un globo colgante de vidrio o sobre una estructura metálica dorada o de cobre, como en la imagen, quedan ideales. No necesitan riego como tal, pero sí es imprescindible pulverizarlas con agua hasta que sus hojas se empapen completamente (una vez por semana). ¡También son aptas para mascotas!

Es un tipo de helecho, con hojas frondosas de bordes ondulados que crecen en forma de corona, asemejándose a un gran nido. Originario de Japón, Australia e India, tiene un porte precioso y si se le deja, puede llegar a ser el protagonista natural de cualquier espacio, ya que puede alcanzar hasta el metro de altura.

Cómo colgar y cuidar el Nido de ave: esta planta es tan robusta que puede crecer en condiciones adversas, incluso en espacios con poca luz, lo que la convierte en una buena opción para el baño. Sin embargo, esto no es lo ideal. Si quieres que crezca bien, procúrale buena luminosidad, evitando el sol directo, y con un grado de humedad alta, hidratando a menudo sus hojas con un pulverizador. Necesita un sustrato húmedo (que no encharcado), por lo que riégala una o dos veces por semana en invierno y entre dos y tres veces a la semana en verano. También es amigable con tus animales.

Súper bonita, con hojas carnosas y redondas, búscale una maceta especial para que destaque. Apropiada para mascotas, no suele ser muy grande y es bastante resistente.

Cómo colgar y cuidar la Peperomia: lo ideal es que la tengas en una habitación iluminada, sin sol directo, aunque tampoco en la sombra porque si no, le costaría crecer. En cuanto al riego, es una planta que necesita poco riego, especialmente en invierno.

Sus hojitas pequeñas son adorables y perennes, y suelen formar un conjunto muy frondoso si se cuidan bien.

Cómo colgar y cuidar la Planta del Himalaya: prospera en semisombra ya que si le da el sol directo sus hojas pueden quemarse. Riégala esperando a que la tierra se seque completamente y quítale las ramas u hojas que se hayan secado de vez en cuando. Queda preciosa dentro de cualquier maceta o soporte que elijas.

Se caracteriza por el intenso violáceo o rojizo de sus hojas y su increíble resistencia, por lo que es perfecta para cultivar tanto dentro como fuera de casa, y para humanos principiantes.

Cómo colgar y cuidar la Tradescantia: es muy fácil de cuidar, pero necesita fundamentalmente luz natural (que no sol directo) y una temperatura cálida (no menos de 12-15 grados), así que opta por mantenerla dentro de casa si vives en un lugar frío. No te pases con el riego, bastará un par de veces a la semana en verano y un riego cada diez días en invierno. Mira qué chula queda sobre cualquier estantería.

Sus hojas aterciopeladas crecen en enredadera y tienen un intenso verde oscuro con manchas plateadas. Una auténtica preciosidad como planta interior.

Cómo colgar y cuidar el Poto plateado: cuélgalo del techo con una maceta colgante específica o ponlo en el lugar más alto de un estante o estantería. Elige un lugar bien iluminado, protegido de los rayos del sol, no le gusta nada el frío y dale un riego moderado (una vez por semana en verano y cada dos semanas en invierno).

Te encantará por sus hojas marmoleadas en forma de corazón. También muy apropiada si eres principiante ya que se propaga fácilmente con esquejes.

Cómo colgar y cuidar el Poto Marble Queen: proporciónale una superficie para que se extienda a gusto y verás qué bien cubre todo, podrás incluso guiarlo para que haga la función de guirnalda decorativa. Necesita poca o luz media (tolera niveles de luz más bajos que la mayoría de plantas de interior) y un riego semanal.

La llaman 'collar de perlas' porque realmente sus hojas parecen perlas, tan redonditas y pequeñitas, que en realidad son reserva de agua. Es de la variedad de las suculentas con un porte muy estiloso que requiere de muy pocos cuidados.

Cómo colgar y cuidar la Planta Rosario: al tener la reserva de agua en sus hojas puede sobrevivir durante periodos de sequía. Requiere una exposición luminosa directa y sus riegos deben ser moderados, deja secar el sustrato antes de regarla otra vez. Quedará espectacular en una maceta colgante cerca de una ventana.

'Columnea' es un nombre genérico que engloba a cerca de 200 especies de origen tropical y llama la atención por el colorido de sus flores, lo que la convierte en una planta de interior ideal para la decoración.

Cómo cuidar la Columnea: debe colocarse en un lugar bien iluminado pero a la sombra, resguardada de los rayos directos del sol. En cuanto al riego, bastará con reglarla una vez a la semana en verano y cada dos semanas en invierno, ya que el exceso de agua en el sustrato es uno de sus peores enemigos. Sin embargo, sí que necesita de cierta humedad, por lo que es conveniente pulverizarla a menudo.

Las más comunes son las orquídeas Cymbidium y provienen de países asiáticos, de Australia y de África, principalmente. Crecen en sentido horizontal, suelen desarrollar un nuevo brote cada año y pueden alcanzar un metro de largo en las especies más grandes. Tanto la forma como los colores de sus flores la convierten en una de las plantas más elegantes para decorar, y en su versión colgante es una auténtica maravilla.

Cómo cuidar la orquídea Cymbidium: su temperatura óptima se encuentra entre los 15º y los 18º, necesita buena luz y debe ser regada de manera que el sustrato de cultivo nunca esté seco del todo.

Esta planta trepadora de hoja perenne procede de Australia y del Sudeste asiático tropical. También se le llama 'millones de corazones' por la cantidad y la forma de sus hojas.

Cómo cuidar la Dischidia: al pertenecer a la familia de las suculentas, requiere de pocos cuidados. Se trata de una planta resistente, acostumbrada a retener su propia reserva de agua. Necesita, eso sí, estar bien iluminada sin sol directo; estar ubicada en un lugar con temperatura superior a 15º, pulverizarla de vez en cuando para mantener su humedad y estar plantada en una maceta con drenaje para que sus raíces no se encharquen con el riego, que deberá ser muy moderado (solo cuando el sustrato esté seco).

Además de tener unas hojas de color verde vivo y unos tallos que crecen en forma de espiral, sus flores emanan una dulce fragancia. Poco más se le puede pedir a esta planta colgante de interior que también es conocida como 'planta de la flor de cera'.

Cómo cuidar la Hoya linearis: cuidado con el riego. Por lo demás, no es una planta complicada de cuidar. Necesita buena luz sin sol directo, riego moderado (sin dejar que se seque por completo) y una temperatura ambiental de entre 15º y 24º.

Otra planta colgante con flor que aporta un plus de alegría a la decoración de casa. Puede encontrarse en el exterior, pero al ser originaria de América del Sur, no soporta muy bien las temperaturas muy frías, por lo que es una planta adecuada para tener en el interior.

Cómo cuidar las petunias: se trata de una especie amante del sol, por lo que hay que ubicarla en lugares muy luminosos. Requieren de agua abundante, pero sin encharcar ni mojar sus pétalos (que pueden estropearse).

También conocida como 'malamadre' o 'planta araña' por sus numerosas, finas y largas hojas verdes, la cinta, además de vistosa, es una de las plantas colgantes de interior más fáciles de cuidar. ¿Por qué? La razón es que acostumbra a almacenar agua en sus raíces y sobrevive más fácilmente si nos descuidamos al regarla.

Cómo cuidar la Cinta: agradece la luz, pero mejor no la expongas al sol directo. De hecho, también tolera los ambientes sombríos o la semisombra. Le gusta la humedad, por lo que se recomienda pulverizar sus hojas de vez en cuando. En cuanto al riego, durante el invierno será suficiente una vez por semana; y en verano debe aumentarse a dos o tres veces.

Esta planta colgante de origen tropical crece normalmente sobre los árboles, pero también la puedes conseguir en macetas si la quieres tener en casa. No tiene hojas sino que está compuesta de tallos largos, delgados y cilíndricos que pueden alcanzar hasta varios metros de longitud. A principios de primavera puede dar flores, que son pequeñas y de color blanco.

Cómo cuidar el cactus muérdago: necesita espacios luminosos, aunque puede vivir en semisombra; y riego moderado, una vez a la semana, aunque dependerá de la luz que reciba: a mayor cantidad de luz, más riego. También agradece que se pulvericen sus tallos de vez en cuando.