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"Creo que las mujeres somos muy interesantes. Tenemos mucho que decir, y a veces es frustrante que todos los papeles principales sean para hombres". Ana de Armas tenía muy claro, cuando pronunció esta frase, que iba a forjarse una carrera llena de papeles importantes, que fueran para ella un reto profesional. Y así ha sido. Pocas actrices pueden presumir de tener, a sus 35 años, 10 premios y 30 nominaciones; entre ellas, a dos Globos de Oro a la Mejor actriz.
El último de ellos, por 'Blonde', su última película estrenada hasta la fecha, que ha resultado muy polémica por el retrato realizado por el director, Andrew Dominik, de la vida de la siempre mítica Marilyn Monroe, adaptando la novela homónima de Joyce Carol Oates. Para unos un ejercicio de maestría de interpretación; para otros, como Emily Ratajkowski, una 'fetichización' del dolor femenino; para otros, una película que no refleja la verdadera historia de Norma Jeane...
Lo cierto es que 'Blonde' ha supuesto el espaldarazo definitivo para Ana de Armas, que nació el 30 de abril de 1988 en Santa Cruz del Norte (Cuba), hija de una maestra y de un trabajador de recursos humanos, en una familia humilde: "Como no tuve ni PlayStation ni DVD, solo podía salir a jugar con otros niños", señaló a Men's Journal.
A los nueve años, la familia se mudó a La Habana y, allí, surgió el deseo de De Armas de dedicarse a la actuación. A los 14, se matriculó en la Escuela Nacional de Teatro de Cuba y debutó a los 18 años en 'Una rosa de Francia' (Manuel Gutiérrez Aragón, 2006), un drama donde compartió cartel con un jovencísimo Álex González.
A Ana le resultaba imposible compaginar sus estudios en La Habana con sus compromisos, así que decidió venirse a los 19 años a España, con solo 200 euros en el banco. Pero le esperaba un proyecto que cambiaría su trayectoria profesional: el papel de Carolina en la serie de Antena 3 'El internado' (2007-2010).
Su etapa española se completaría con proyectos de muy diversos tipos. Por ejemplo, la película 'Mentiras y gordas' (2009, con Mario Casas), la serie histórica 'Hispania, la leyenda' (2010-2012), la película de terror 'El callejón' (2011) o la comedia romántica 'Por un puñado de besos' (2014).
A EE.UU.... sin saber inglés
Para poder ampliar su carrera, decidió asentarse en Estados Unidos y estudiar inglés (no tenía ni idea y tardó dos años en aprender bien el idioma). Eso no le impidió ser pronto fichada para trabajar con uno de los grandes, Keanu Reeves, en la película de terror 'Toc Toc' (2015). Ese paso lo recuerda así: "Mudarme a Los Ángeles fue duro. Tenía una carrera en España, y tienes que olvidar tu ego. Volví a ser una donnadie".
Tras varios proyectos sin tanta repercusión, Hollywood le tenía preparado un papel estelar (nunca mejor dicho) para convertirse en una de las actrices más reclamadas del momento. Denis Villeneuve le eligió para protagonizar 'Blade Runner 2049', la secuela de la legendaria película de Ridley Scott, junto con Ryan Gosling y Harrison Ford.
Tras un secundario en 'La red avispa', con Penélope Cruz, consiguió un papel en 'Puñales por la espalda', papel que le valió su primera nominación a los Globos de Oro. Allí trabajaría por primera vez con Daniel Craig, con quien repetiría en 'Sin tiempo para morir', la 25ª película de Bond. Ana de Armas se convirtió en la segunda chica Bond latina de la historia, tras Talisa Soto.
Luego repetiría en el género de acción en 'El agente invisible', que se convirtió en la película en lengua inglesa más vista de Netflix de 2022, una cinta que vino a enmendar las terribles críticas cosechadas con el thriller pseudoerótico 'Aguas profundas', que se estrenó directamente en Amazon Prime Video y en el que conoció al que fue su pareja durante un tiempo, Ben Affleck. La presión que los 'paparazzi' ejercieron sobre ambos fue el detonante para que decidiera marcharse de Los Ángeles, donde llevaba 7 años viviendo, según declaró a ELLE USA.
Pero, sin lugar a dudas, sería el papel de Marilyn Monroe en la película de Netflix 'Blonde' la que supondría un antes y un después en su carrera. La cinta fue dirigida por Andrew Dominik, que supo nada más verla que ella era la adecuada para el papel, según explicó en 'Vanity Fair':" Sólo tuve que hacer una audición para Marilyn una vez, y Andrew me dijo: 'Eres tú', pero tuve que hacer una audición para todos los demás". Los productores. La gente del dinero. Siempre había gente a la que tenía que convencer".
No pararon de lloverle críticas: que si no tenía suficiente experiencia para semejante papel, que si su acento era muy latino, que si las escenas eran demasiado explícitas sexualmente... Entre los que salieron a 'defenderla' estaban la Marilyn Monroe Estate y el productor ejecutivo de la película 'Blonde', Brad Pitt.
Lo cierto es que es un largometraje del que se puede sentir muy orgullosa y del que no ha parado de compartir contenidos en su perfil de Instagram, @ana_d_armas. Por ejemplo, algunas imágenes de su prueba de pantalla, que hizo en el día de Acción de Gracias de 2018 y con el que convenció a todos de que era la idónea para el papel de Norma Jeane:
La vida de Ana de Armas parece sonreír en todas sus facetas, personal y profesional. Mantiene una relación afectiva con Paul Boukadakis, vicepresidente de Tinder, y tiene pendiente dos estrenos: 'Ghosted', una película romántica y de aventuras donde sustituyó a Scarlett Johansson y donde comparte cartel con Chris Evans; y 'Ballerina', otra película de acción en la que se reunirá de nuevo con Keanu Reeves.
Después de estos papeles, seguirán muchos grandes éxitos, teniendo en cuenta su filosofía de vida, en la que late una triunfadora: "Hoy, cuando leo un guion, veo si hay algo especial para mí. Sólo quiero interpretar grandes personajes", ha declarado. Esperemos que pronto sus estanterías se llenen con un Globo de Oro y... ¿por qué no? un Oscar.
