Estamos en pleno verano, quizás no te hayas ido de vacaciones o nos estés leyendo desde la playa, pero estás en este artículo por una razón: quieres conocer las tendencias del próximo otoño/invierno. Cada temporada ocurre lo mismo, llega un momento en el que cambiamos el chip, parece que nos aburrimos de la ropa que tenemos en el armario y ya solo tenemos nuestro radar fashion puesto en saber qué llevaremos (y cómo) la próxima estación.
Además, el próximo septiembre (con todos posiblemente vacunados) todo apunta a que las puertas de las oficinas volverán a abrirse, por lo que, la rentrée que vivimos cada post-verano, se acentuará aún más este año. Así que, ¿qué mejor excusa para estrenar outfits que volver a nuestros puestos de trabajo? Porque volverán los atascos y los días interminables pero también los reencuentros y los looks inspiradores, alejados ya del uniforme del teletrabajo (con el chándal a la cabeza).
La pasarela ha hablado y ya conocemos todas las tendencias que podremos ver en nuestras perchas pero... entre todas ellas, ¿cuáles son las imprescindibles? Estamos aquí para responder a esta pregunta. Olvídate de un catálogo infinito de looks porque vamos a ir al grano para resumirte, de arriba a abajo y pieza por pieza, todas las claves del otoño/invierno 2021-2022. Es decir, vamos a analizar cuál es EL vestido, EL color, EL zapato... así hasta completar una lista de catorce imprescindibles que no pueden faltar en tu armario la próxima temporada.
El estilo: los sesenta
Tras varias temporadas viajando a los años setenta (desde en su versión hippy a su faceta más glam), esta vez, los diseñadores retroceden en el tiempo una década más para inspirarse en el look mod de los sesenta. Audrey Hepburn (en películas como Charada), Twiggy (con sus minivestidos babydoll) o Catherine Deneuve (siempre con botas por la rodilla) serán tus nuevas musas. Es tan chic, que no hace falta actualizarlo, lo mejor es llevarlo en forma de total look.
El color: metalizado
Desde el plata al dorado. Todo vale siempre que tenga acabado metálico. El teletrabajo hizo que nos entregáramos al chándal y la comodidad (y, para qué nos vamos a engañar, han llegado para quedarse) pero ha llegado el momento de reivindicar también la sofisticación 24/7. Los tonos bling bling dejan de ser exclusivos de los estilismos nocturnos y ahora salen (y brillan) bajo el sol en tu día a día. Si apuestas por su faceta más discreta, lo mejor es combinarlo con prendas básicas y tonos neutros.
El print: la raya diplomática
El estilo sartorial llega a nuestro armario en todas sus variantes, desde el traje sastre completo (chaleco incluido) a los mocasines y, cómo no, su estampado estrella: la raya diplomática. Aunque los tonos grises son los más buscados, la verás también en otros colores sobrios como beiges o marrones o, incluso, en versión eléctrica con el sello de Lorenzo Serafini para Philosophy. El diseñador italiano tiene el secreto para romper con la seriedad de este print, al apostar por lucirlo con notas college (en un look mucho más desenfadado) y mezclarlo con otros motivos.
El tejido: el punto
Lo verás en forma de canalé, en ochos, con cenefas de inspiración après-ski... Es un básico invernal, pero la gran novedad reside en que ahora se lleva de pies a cabeza, accesorios incluidos. Has leído bien y, para muestra, el estilismo de Chloé creado por Gabriela Hearst. Vestidos extralargos, jerséis gruesos, a modo de conjuntos a dos piezas... ¿Puede ser más apetecible? (Y eso que estamos a rozando los 40º...)
El abrigo: de cuadros
Desde las parkas a los de corte masculino, todos ellos tienen un marcado acento british (Parece que estilo de The Crown se ha convertido en referente esta temporada). Nos encanta la opción de combinarlo con prendas que lleven otros estampados, ya sea un tipo de cuadros distinto –como propone Maria Grazia Chiuri para Dior– o algo totalmente diferente, como unas flores, siguiendo los pasos de Hedi Slimane para Celine.
La chaqueta: una blazer cropped
Llegaron este verano a nuestro armario y alargan su vida fashion para colarse en el podio de las piezas más buscadas de la temporada. De tweed, con notas college, tipo esmoquin... hay tantas posibilidades como tipos de blazer, pero con una diferencia: que ahora se acortan y quedan a la altura de las costillas.
El top: de cuello alto
Y no solo nos referimos a los clásicos jerséis de cuello cisne, sino a todo tipo de tops. Por supuesto, esto incluye también a las camisetas. Es más, la premisa de la pasarela parece ser que cuánto más ceñidos vayan al cuerpo, mejor. Un tip: puedes llevarlos solos o como capa interior, por ejemplo, asomando bajo una camisa, tal y como vimos en el desfile de Hermès.
Los pantalones: XXL
Desde los clásicos pantalones masculinos, tipo sastre y con pinzas, a los cargo. Todos ellos se reinventan. Si con los tops decíamos que cuánto más ajustados mejor, en este caso pasa justamente al revés: la tendencia consiste llevarlos en clave oversize. Piensa en cómo te quedarían unos pantalones si se los robaras a tu novio/hermano/amigo... Pues, más o menos, así es como debes llevarlos. Si quieres rebajar un poco el efecto volumen, opta por lucirlo con un top entallado.
La falda: mini
Si vuelve el estilo sixties, la falda estrella no podía ser otra. La creación con la que Mary Quant revolucionó toda una época sigue más vigente que nunca y la verás con volantes, a cuadros en versión escocesa, ajustada y en clave micro, con el talle a la cadera emulando a los 2000’s... Pero siempre manteniendo su espíritu ultrafemenino. ¿Su mejor aliado? Unas botas de caña alta.
El vestido: de flecos
No solo aportan una dosis extra de movimiento al outfit, también son el toque trendy perfecto para reinventar cualquier pieza. Ya sea decorando el bajo al más puro estilo charlestón –como nos muestra Kim Jones para Fendi–, con efecto deshilachado en diseños de punto siguiendo los pasos de Chanel o a lo largo (y ancho) de todo el look, como propone la firma italiana Salvatore Ferragamo, serán claves el próximo otoño.
El accesorio: el pañuelo
Pero no como lo imaginas. Lo hemos llevado de (casi) todas las maneras posibles: al cuello, a modo de cinturón, sobre los hombros, como top... Sin embargo, quizás hay una que teníamos olvidada y es, curiosamente, la más clásica. Ahora se lleva anudado a la cabeza, tal y como lo lucían las musas de la época dorada de Hollywood. ¿Lista para trasladarte a una película de Hitchcock?
El bolso: en borrego
Te colgarás por esta piel y, nunca mejor dicho, porque cubre todos los it-bags de la estación. Y cuando decimos todos es todos, sin importar el tamaño o el estilo: en clave oversize según Burberry, de inspiración étnica como pudimos ver en el desfile de Chloé o en forma de bandolera, tal y como nos muestra Longchamp.
El calzado: las botas altas
Te lo hemos avanzado a lo largo de todo este artículo, las botas de caña alta dejarán huella en tu armario el próximo otoño/invierno. ¿El largo perfecto? (Como mínimo) a la altura de la rodilla. La buena noticia es que vuelven las de estilo cowboy, así que, sino te deshiciste de ellas el invierno pasado, prepárate para rescatarlas.
La joya: los pendientes con flecos
Con reminiscencias étnicas, decorados con pedrería, a modo de cadenas... y siempre largos, llegando, incluso a tocar los hombros. ¿Nuestro consejo? Ríndete al maximalismo más glam e, al igual que los colores metalizados, incorpóralos a tus estilismos, no solo en clave party sino en cualquier ocasión.