• Renée Zellweger opta a su segundo Oscar, esta vez como protagonista.
  • 'Judy' se estrena en cines el 31 de enero.

Gala de los Globos 2020. Todo el mundo pensando que el premio a Mejor actriz de drama se lo va a llevar Scarlett Johansson por 'Historia de un matrimonio'. Abren el sobre y... ¡sorpresa! El nombre que anuncian es el de Renée Zellweger. Gala de los Critics’ Choice Awards 2020: mismo resultado. Gala de los SAG Awards 2020: vuelve a ganar ella. ¿Se repetirá la historia el próximo 9 de febrero en los Oscar? Eso todavía tendremos que esperar para saberlo. Lo que sí podemos hacer ya es disfrutar de la brillante actuación de Renée en 'Judy', su última y laureada película gracias a la cual ha resurgido de sus cenizas como el Ave Fénix.

"Diecisiete años después no tenéis mala pinta" fueron las palabras que pronunció la actriz tras recoger su último Globo de Oro. Y es que ahora opta a su segunda estatuilla, pero la última la recibió en 2004 por 'Cold Mountain' como Mejor actriz de reparto. Mucho ha llovido desde entonces en la vida de esta actriz que estuvo trabajando sin parar desde que comenzó su carrera y que fue capaz de demostrar que lo mismo interpreta un drama que una comedia que canta, baila, monta a caballo o lo que haga falta. Pero después del éxito abrumador sí que necesitó parar, por salud, para recuperar el rumbo de sus decisiones. Entonces la dieron por muerta (laboralmente hablando). Pero nada más lejos de la realidad. Ahora ha vuelto, más fuerte que nunca y decidida a cerrar muchas bocas con su mejor arma: su brillante trabajo.

Su carrera

Tiene más de 40 títulos a sus espaldas desde que comenzara a trabajar como actriz en la década de los 90. Y ha hecho de todo. Desde terror con películas como 'Expediente 39', drama en 'Cinderella Man', musical en 'Chicago', cine histórico en 'Cold Mountain', western en 'Appaloosa'... También ha prestado su voz a películas de animación como 'El espantatiburones'. Aunque donde más ha sobresalido es en el terreno de la comedia con cintas como 'Yo, yo mismo e Irene' en la que actuaba junto a Jim Carrey y la saga de películas con la que saltó a la fama mundial, las de Bridget Jones.

En 2019 también se ha pasado a las series de la mano de Netflix con 'Dilema', que según su sinopsis se trata de un thriller que explora las reacciones en cadena que tienen lugar cuando personas nobles y de buen corazón realizan actos inapropiados como que una misteriosa inversora (Zellweger) le ofrezca un trato a una científica desesperada por conseguir financiación a cambio de pasar una noche con su marido. Una especie de nueva versión de 'Una proposición indecente' pero con cambios de sexo.

Bridget

Pero sin duda alguna, si ha habido un personaje decisivo en la vida de Renée ese ha sido el de la reportera de televisión que representa a la eterna 'solterona'. La primera película se estrenó en 2001 y en esos años todavía vendía el eterno cuento de la treintañera que no es capaz de decidir entre el hombre bueno pero aburrido o el pícaro mujeriego infiel por naturaleza. A estas alturas de la película, las mujeres ya estamos en otros niveles emocionales y puede que por eso el regreso con una tercera película en 2016, 'Bridget Jones's Baby', fuera todo un fracaso. Por eso y porque cambiaron a Hugh Grant por Patrick Dempsey.

Renée Zellweger Bridget Jones
D.R.
Fotograma de ’El diario de Bridget Jones’.

Sus aumentos de peso para rodar las películas también fueron de lo más comentados. Para rodar las dos primeras entregas se vio obligada a engordar 13 kilos (y después perderlos tal y como impone la tiranía de Hollywood) siguiendo una dieta hipercalórica que incluía grandes cantidades de pizza, patatas fritas, bollos, refrescos, mantequilla de cacahuete, donuts y espaguetis. Para la última cinta ya no hacía falta que estuviera gorda. "Sharon (Sharon Maguire, directora de la película) quería que mostráramos que Bridget había logrado alcanzar su peso ideal y, al mismo tiempo, que eso no había conseguido que su vida fuera perfecta", afirmó la intérprete en una entrevista en The Telegraph.

Calma

Después de la tormenta siempre llega la calma, y ese punto para la actriz llegó en 2010. Durante seis años, le dijo adiós a Hollywood y a todo su glamour. "La agenda me había atrapado y no me estaba cuidando. Estaba realmente exhausta y tomaba decisiones que no eran precisamente saludables. Solo necesitaba apartarme y tener una perspectiva diferente para poder tomar decisiones más saludables", confesó a Deadline.

Este paréntesis le sirvió para descubrir a una nueva Renée. Una Renée que dejaba a un lado "los rodajes, las giras promocionales, los vestidos y los tacones" para dedicarle tiempo a su familia, para estudiar y para colaborar con organizaciones benéficas. "Hace mucho tiempo que quería dedicarme a asociaciones que luchan por la defensa y protección de las mujeres en todo el mundo. Por eso pasé un tiempo en Liberia desarrollando un programa escolar para mujeres jóvenes".

Su físico

La vuelta llegó con la tercera película de Bridget Jones y en ese momento todo el mundo habló de su cambió físico. Un tabloide afirmó que se había operado los ojos. Pero ella no se quedó callada y publicó una carta en el diario The Huffington Post bajo el título 'Podemos hacerlo mejor'. "No es que sea asunto de nadie, pero no tomé la decisión de alterar mi cara y someterme a una cirugía en los ojos. Este detalle no es de ninguna importancia para nadie, pero el hecho de que la posibilidad por sí sola haya sido discutida entre periodistas respetados y se haya convertido en una conversación pública es una ilustración desconcertante de la confusión de noticias/entretenimiento y la fijación de la sociedad por el físico". Puedes leer la carta completa aquí.

Renée Zellweger Bridget Jones's Baby
Matthew Eisman//Getty Images
Renée Zellweger durante la promoción de ’Bridget Jones’s Baby’.

Judy

Este es el papel que le ha devuelto la gloria que nunca debieron arrebatarle. La historia narra los últimos años de la vida de Judy Garland, los más duros por culpa de sus adicciones, sus divorcios, sus problemas familiares y su ruina económica. Como parte de su preparación, Zellweger dio clases de música, baile y busco todo tipo de información sobre el gran mito que pasó a la historia por ser Dorothy en 'El mago de Oz'.

No sabemos si finalmente sumará el Oscar a su mencionada lista de premios de este año. Tampoco lo necesita. Ella ya ha conseguido demostrarle al mundo que, en realidad, nunca se fue.