Aunque, según el dermatólogo Ricardo Ruíz (www.ricardoruiz.es), el término piel sensible atiende más a razones comerciales que médicas, es cierto que son muchos los pacientes que acuden a su consulta aquejados de enrojecimiento y escozor en la piel cuando se exponen a determinados agentes: cambios de temperatura, algunos alimentos, estrés emocional, ansiedad, depresión e incluso el agua. También se han identificado pequeños parásitos –Demodex-, y estafilococos que viven en los folículos pilosos, como responsables de la infección. Entre ellos, la bacteria del acné juvenil Propionibacterium acnes es la más común. Y la exposición al sol puede contribuir a aumentar la vasodilatación y empeorar la afección.
En realidad, tras el concepto “piel sensible” se encuentran tres problemas: rosácea, dermatitis atópica e intolerancia a cosméticos. Los desgranamos.
Rosácea
Síntomas: “Enrojecimiento difuso en distintas zonas del rostro relacionadas con los cambios de temperatura”, según el dermatólogo.
Solución: Evitar el sol, y los brotes se evitan con antibióticos y e isotretinoina –un retinoide o derivado de la vitamina A-.
A evitar: “La cortisona en crema, ya que suele empeorar los síntomas”, advierte el Dr. Ruíz.
Producto recomendación: Emulsión ligera Antirojeces SPF 20, de Avène, con extracto de Ruscus, rico en saponinas -0,1%-, que mejora la circulación cutánea y agua termal calmante y desensibilizante.
Dermatitis atópica
Síntomas: descamaciones, no solo en el rostro sino también en el cuero cabelludo, brazos y piernas. “En general, estos pacientes suelen ser alérgicos al polvo o al polen”, asegura el experto.
Solución: “Las cortisonas suaves suelen ser efectivas si se emplean de forma prudente”, según el doctor.
Producto recomendación: Exomega Crema Emoliente D.E.F.I, de A-Derma, sin parabenos, conservantes ni perfume, actúa sobre todos los parámetros de la dermatitis atópica y la sequedad cutánea. Y su envase patentado mantiene la fórmula estéril durante todo su uso.
Intolerancia a cosméticos
Síntomas: Eccemas y escozor en la piel cuando existe contacto con determinados productos tópicos. “En estos casos es necesario realizar pruebas para descartar alergias asociadas al níquel, las fragancias y los conservantes”, apunta el doctor.
Solución: “El manejo de estos pacientes es muy difícil. Por lo general no toleran ninguna crema que contenga conservantes o perfumes, y algunos ni siquiera soportan la vaselina pura ni las aguas termales. En esto casos hay que recurrir a los corticoides orales para controlar los brotes de enrojecimiento”, asegura.
Producto recomendación: Crema Biomimética, de Institut Esthederm, su excepcional fórmula pone “en punto muerto” a las pieles más frágiles y reactivas. Especialmente indicada para las que no toleran ningún producto y las pieles debilitadas tras un peeling o tratamiento láser.
