¿Problemas de fertilidad?

Según Virginia Ruipérez, miembro de la Sociedad Europea de Medicina Naturista Clásica, capacitada por la Facultad de Medicina y directora de Shantivir, “la fertilidad es una cualidad vital significa el estado óptimo de salud global”. “Nuestra fertilidad, igual que nuestra salud, está condicionada por nuestro estilo de vida y los crecientes problemas de fertilidad son un reflejo de esto”, afirma. “Debido a las condiciones de nuestro estilo de vida, en la actualidad es esencial realizar un plan preconcepcional y adoptar una vida saludable para favorecer un óptimo estado de salud global y una adecuada fertilidad”, recomienda la experta, autora de “Fertilidad Natural. Método Naturista de Fertilidad Shantivir”. 

 “En los países desarrollados la esterilidad idiopática, de causas desconocidas, ha ido aumentando a consecuencia de factores ambientales y del estilo de vida”, dice Virginia Ruipérez. Entre estos factores esta experta destaca la contaminación ambiental por sustancias químicas derivadas de la industria, las radiaciones, los materiales de construcción, los cosméticos o los agroquímicos. “Son factores que van contaminando el aire, el agua y los alimentos, provocando una  reducción de la fertilidad”, dice. “La alimentación industrial actual, pobre en nutrientes vitales para mantener las funciones fisiológicas, es otro de los factores que perjudica la fertilidad”, dice. 

La experta destaca los productos alimenticios industriales y procesados, cargados de tóxicos químicos como los agroquímicos (pesticidas y herbicidas) y aditivos (conservantes y colorantes), entre los que más afectan a nuestra fertilidad. A esta alimentación demasiado procesada Virginia Ruipérez añade el consumo excesivo de sustancias como el alcohol, café y tabaco, que también dañan nuestra fertilidad. “Todos estos tóxicos químicos se almacenan en nuestro organismo, por lo que es importantísimo favorecer su  depuración para mejorar la fertilidad”, explica. Según la experta, si queremos mejorar nuestra fecundidad de forma natural debemos asegurarnos una alimentación sana y equilibrada, rica en nutrientes esenciales, basada en alimentos naturales sin procesar y preferiblemente de agricultura y ganadería ecológica”.

“Otros factores importantes que influyen negativamente en nuestra fertilidad son los desequilibrios hormonales, las enfermedades de nuestros órganos sexuales, los fármacos utilizados para otras enfermedades, los empastes dentales, los métodos anticonceptivos como la píldora, las dietas de adelgazamiento, así como el estrés o estados emocionales negativos”, dice la experta. Según Virginia Ruipérez, “el aporte de nutrientes vitales para la fertilidad junto con un buen equilibrio psíquico-emocional, son esenciales para lograr un embarazo”. 

“Los nutrientes vitales de los alimentos intervienen en todas las funciones orgánicas y en la bioquímica de la fertilidad -explica Virginia Ruipérez- y la vanguardia de las investigaciones científico médicas confirma la íntima relación entre salud y alimentación”. “Para que la fertilidad humana funcione de forma adecuada son necesarias concentraciones óptimas de nutrientes esenciales, como minerales y vitaminas, favorecedores de la sexualidad y la fertilidad”, dice. Como señala la experta, “una nutrición saludable también mejora la calidad de los gametos -óvulos y espermatozoides-,  del material genético que contienen y la salud de los órganos y tejidos reproductivos”, afirma. “También neutraliza los daños producidos por los tóxicos químicos que dañan la calidad de los óvulos o espermatozoides y que favorecen los desequilibrios de nuestros órganos reproductores”, añade.

La experta nos explica cómo influyen algunos nutrientes en nuestra fertilidad. Vitaminas del complejo B. Necesarias para el correcto funcionamiento de nuestra hipófisis, encargada de orquestar toda la sinfonía hormonal, como la maduración de un óvulo o la producción de esperma. Presentes en los cereales integrales. Betacarotenos. Esenciales para la producción de progesterona, hormona que mantiene el embarazo. En zanahorias, calabaza, melón o mango. Zinc. Imprescindible para la producción de testosterona, hormona de la libido y de la  producción espermática. En las pipas de calabaza. Yodo. Nuestra tiroides lo necesita para producir hormonas tiroideas, esenciales para la fertilidad. Su fuente más saludable son las algas marinas. Ácidos grasos esenciales. Imprescindibles en la síntesis hormonal, los encontramos en los frutos oleaginosos.

Merecen un apartado completo por su importancia sobre nuestra fertilidad. Como señala la experta, su aporte es esencial para optimizarla. “Su mayor beneficio es neutralizar los radicales libres y los tóxicos químicos contaminantes, combatir sus efectos nocivos y limitar el daño que estos hacen a nuestra fertilidad”, explica Virginia. “Además, mejoran la calidad ovocitaria y espermática, la salud de los órganos reproductores y el equilibrio hormonal”. La mayoría son constituyentes naturales de las plantas, así que los encontrarás en frutas, verduras y hortalizas. Los antioxidantes vitamínicos más importantes son el betacaroteno de las zanahorias, la vitamina C de la naranja y vitamina E de las nueces. ¡Que no falten en tu dieta!

Aunque los consejos de la experta pueden servirte para mejorar tu fertilidad, Virginia Ruipérez aconseja acudir a un experto especializada en fertilidad y maternidad, como los de Shantivir. El Método Naturista de Fertilidad Natural con el que trabajan en Shantivir consiste en el conocimiento de la fertilidad femenina y masculina. “Se trata de familiarizarse con nuestra fertilidad y en aprender cómo optimizarla”, afirma. Sus pilares básicos, como explica esta experta, se basan en “una alimentación saludable y optima para la fertilidad, la depuración del organismo, la sexualidad fértil y el equilibrio emocional y mental positivos”. “Es una propuesta de estilo de vida saludable que favorece y optimiza la fertilidad y la salud reproductiva de ambos progenitores desde la perspectiva de la Medicina Naturista”, explica.