¿Qué te han regalado? Saber diferenciar un perfume de un eau de toilette te ayudará a saber qué esperar de cada cada uno y elegir mejor dependiendo del momento, el lugar, el estado de ánimo o la estación. Esto tiene una explicación.
Dependiendo de cuánto aceite y alcohol lleve, es decir, de lo concentradas que sean (puesto que toda fragancia es una mezcla de aceites esenciales disueltos el alcohol), tendrás a tu disposición una Eau fraîche o, lo que es lo mismo, un "agua fresca". Es decir, la versión más diluida de la fragancia. Más refrescantes para las temporadas de calor gracias a las notas cítricas, oceánicas y frutales.
La colonia (eau de cologne) tiene una concentración de entre un 2 y un 4%. Asegura algo más de duración, casi el doble que un agua fresca y suele corresponder a esas mismas notas, incluyendo alguna flor blanca que aporte frescura.
El eau de toilette, la más común, dura unas tres horas. Sus composiciones se mueven entre frutas, flores y notas dulces, pudiendo vaporizarse varias veces al día.
El eau de parfum es ideal para quien busca intensidad ya que su concentración se mueve entre el 15 y el 20%. Perfecta para dejar estela en la noche. No están recomendadas bajo el sol, ni en los días de calor.
Y por último, el menos usado, el extrait: más caro y aceitoso. Unas pocas gotas pueden permanecer hasta el día siguiente.