• Un 60% de la población LGTBIQ+ europea evita darse la mano con personas de su mismo sexo en público "siempre" o "a menudo" por miedo (en España el porcentaje es de 48%).
  • Varias polémicas trans recientes han puesto los derechos de este colectivo en el punto de mira.



Cuando uno se asoma a las redes sociales cada mañana y ve en los TT noticias homófobas, absurdas polémicas sobre 'sentirse o no' mujer si es 'trans' o el tornado que se forma cuando un famoso –por el motivo que sea– anuncia (¿confiesa? ¿desvela? la verdad es que no sé muy bien qué verbo usar) que es homosexual, es fácil darse cuenta de todo lo que queda por hacer.

2020 es un año que vamos a recordar sí o sí. El año de la COVID-19, el año de la pandemia; el año en que vivimos peligrosamente y el año en que nos encerramos en casa, en el dolor y la incertidumbre. El año en el que el activismo LGTBIQ+ no es presencial, sino en redes; en el que el Orgullo se celebra online, extraño pero más fuerte que nunca.

Hace poco más de un mes, la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea (FRA) dio a conocer los datos de una macroencuesta que interpeló a 140.000 personas LGTBI en la UE, Serbia, Reino Unido y Macedonia y dejó claro todo ese camino que queda pendiente por hacer. El resumen es que el colectivo tiene aún "niveles elevados de discriminación" y que, con respecto a 2012 en que se hizo el último estudio, el progreso es "poco o ninguno".

preview for SINFILTROS: Afrontar el 'bullying' por LGTBIfobia

¿En serio no hemos hecho nada en ocho años?

No, no se puede ser tan negativo. La encuesta del FRA desvela que donde más se ha avanzado es en la visibilidad: un 47% (frente al 36% de 2012) reconoce con normalidad su identidad sexual en su entorno –y eso que todavía hay un 27% al que le cuesta reconocerlo en su familia– y, de hecho, España, con un 53%, es uno de los países con más visibilidad. Sin embargo, si lo piensas, una tasa del 53% tampoco indica una abrumadora mayoría; de ahí los tornados cuando alguien como Pablo Alborán explica en Instagram que es gay.

Otros datos relevantes de la encuesta:

  • Un 60% evita darse la mano con personas de su mismo sexo en público "siempre" o "a menudo" por miedo (en España el porcentaje es de 48%).
  • Un 32% reconoce que no va a determinados sitios "siempre" o "a menudo" por miedo a ser discriminado. Un 47% de los encuestados españoles dice temer que les hagan daño en un espacio público y un 40% en el transporte.
  • Aunque el nuestro es de los países con una tasa menor de la UE en este tipo de delitos, un 41% de los entrevistados declara haber sido acosado (insultado por diversas vías, amenazados, perseguido...) en el último año. Pero solo un 7% lo denunciaron a cualquier entidad; un 51% declara no haberlo hecho porque fue "algo pequeño".
  • ¿Qué sucede en el ámbito laboral? El colectivo LGTBI español es el segundo en normalizar su situación ante sus compañeros, declarando que está "muy satisfecho". También en nuestro país, un 20% de los encuestados declaran haberse sentido discriminados por su condición sexual, pero a cambio desvelan que el apoyo de sus colegas es mayoritario (un 60%).
marcha anual por los derechos gay en nueva york ellees
Peter Keegan//Getty Images

La lucha trans, aún más difícil

En la encuesta, la FRA afirma que transexuales e intersexuales tienen más difícil la defensa de sus derechos. Hablemos de discriminación: un 63% de 'trans' en España asegura haber sufrido algún tipo de marginación; le siguen intersexuales (61%), lesbianas (45%), bisexuales (38%) y homosexuales (37%). Esa segregación de 'trans' se incrementa en el ámbito laboral, donde un 38% asegura haber tenido dificultades para encontrar empleo, o en las tiendas, donde un 31% asegura haber tenido dificultades.

El colectivo 'trans' ha vuelto a aparecer últimamente en las noticias después de un tuit en el que la escritora de 'Harry Potter', J.K. Rowling, compartía un artículo y se preguntaba: "Gente que menstrúa. Estoy segura de que solía haber una palabra [para definir a] esta gente".

xView full post on X

Muchos internautas se ofendieron con el comentario, considerando que también era discriminatorio hacia otras personas que también menstrúan, como lxs transgénero o de género no binario y hacia las mujeres que por el motivo que sea no tienen menstruación.

Por otro lado, hace dos semanas la polémica salpicó al PSOE cuando trascendió un documento interno titulado 'Argumentos contra las teorías que niegan la realidad de las mujeres' en el que negaban las teorías 'trans' y 'queer' señalando que el sujeto político del feminismo son las mujeres y afirmando que el activismo trans "desdibuja a las mujeres como sujeto político y jurídico, poniendo en riesgo los derechos, las políticas públicas de igualdad entre mujeres y hombres y los logros del movimiento feminista".

manifestación a favor de los derechos lgtbiq en washington ellees
SAUL LOEB//Getty Images

Las asociaciones trans reaccionaron reclamando la urgencia de aprobar una ley, largamente exigida en el tiempo, que defina claramente el derecho de cada persona sea quien defina su género, sexo y orientación sexual, sin que haya informes psicológicos, médicos o de otro tipo que lo acrediten.

En la mayoría de los países, según informa Amnistía Internacional, la población trans "debe someterse a humillantes procesos —incluido un diagnóstico psiquiátrico y una esterilización irreversible—, que violan sus derechos humanos. Sólo en siete países no existen estos procesos: Argentina, Bélgica, Colombia, Dinamarca, Irlanda, Malta y Noruega".

Ser LGTBIQ+ en la escuela: un problema que no cesa

Nos lo comentó el escritor y periodista Juan Arcones en un 'Sin Filtros': el 'bullying' por LGTBIfobia sigue presente, y mucho, en colegios e institutos; él mismo fue una víctima. El estudio FRA ha recabado por primera vez la situación de jóvenes LGTBI de 15 a 17 años. El 50% asegura que en los centros escolares, alguien siempre les defendió, un porcentaje que, según avanzamos en la edad, se reduce: 26% para el tramo de 18 a 24 años; 8% de 25 a 39 años y 6% para mayores de 40.

Otra buena noticia es que un 74% de esa franja de edad más joven reconoce que en el colegio mantiene tranquilamente la identidad que desea, algo que sus mayores no pudieron: un 52% de 18 a 24 años, un 26% de 25 a 39 y un 2% a partir de 40.

Vamos ahora con las malas noticias. Sí, Juan Arcones tiene razón; en general, los centros escolares no son un sitio bueno para la población juvenil LGTBIQ+. Según la encuesta, un 43% de encuestados de todos los países ha sido ridiculizado, insultado o amenazado por su condición sexual. En España la tasa es del 34%.

Sí, aún queda mucho por hacer.

manifestacion en los angeles ellees
David McNew//Getty Images