Si esta temporada te has hecho (o conservas del año pasado) con un buen armario cápsula de verano, seguro que en él guardas un vestido blanco. Pero, si además de estar teñido por el color más luminoso de la paleta cromática, éste revela detalles deliciosos como unas delicadas puntillas, unos volantes coquetos y/o unos bordados preciosos, ya puedes estar contenta y satisfecha de haber hecho una gran compra. ¿Quieres saber por qué? Pues porque primero: pocas prendas anuncian con tanta rotundidad el buen tiempo como un vestido blanco; segundo: aporta una luz irresistible al rostro (y a la piel besada por los primeros rayos de sol) y tercero: será tu opción más increíble si eres de las que suspiran por una estética romántica, con tintes bohemios y aderezada con unas flores silvestres sobre la melena suelta e imperfecta. Y espera, porque lo mismo te lo puedes poner para ir a trabajar como para un apetecible plan de barbacoa con amigos, pasando por una mañana de compras en el mercado, pero también, si abres un poco la mente, podría ser el vestido de novia perfecto si te decantas por una ceremonia más bien informal en la playa o un ambiente campestre. Sólo tienes que imaginártelo con unas alpargatas de cuña o unas sandalias de cuero planas y una corona de flores en la cabeza. Una imagen idílica muy sencilla de alcanzar, desde luego.

Si no has sucumbido al gustazo de tener en tu repertorio estival un bonito vestido blanco romántico, que sepas que aún puedes abrazar la tendencia porque estamos ante un vestido que ya goza del estatus de clásico año tras año y esta temporada viene en infinidad de cortes y estilos, para que tengas la oportunidad de elegir aquel con el que más cómoda te sientas. Largo acariciando los tobillos, a media pierna o a mitad del muslo, de tirantes, con volantes, de cuello en V, con mangas abullonadas... Prepárate porque este verano el formato se amplía a conjuntos de dos piezas (top o blusa con falda) dispuestos a robarte el corazón y geniales para llevar por separado con jeans, faldas vaqueras y tus tops veraniegos. ¿Quieres saber con qué más registros puedes llevar tu vestido o conjunto romántico de color blanco? Si no sabes qué ponerte por encima cuando hace fresco por las mañanas o con qué calzado y otros accesorios aderezarlo para no desmerecerlo, es cuestión de pensar en qué estilo o rollo quieres transmitir y ver si lo puedes adaptar a través de alguna de las interpretaciones que las prescriptoras de Instagram hacen con su vestido/conjunto más delicado:

Si nunca renuncias a tus deportivas

Pues no pasa nada, porque sea como sea tu vestidito (largo, mini o midi) o falda romántica, se mimetizará con el rollazo de tus sneakers favoritas.

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Julie Sariñana mezcla su precioso vestido romántico con unas Golden Goose en verde y glitter, Gabrielle wears denim se va a hacer recados con unas Superga blancas (atención, calcetines blancos para que no rocen el tobillo) y Collage Vintage prefiere sus clásicas Converse blancas para su falda maxi, así como una camiseta anudada y una cazadora vaquera oversized.

Si te va el rollo cowgirl

No lo dudes, mientras el tiempo lo permita, emparéjalo con unas botas western. En marrón con bordados como Lucía Bárcena o Sheila Conde apuestan para combinar su 'co-ord' de dos piezas bordado, o bien en negro como Bartabac hace con su vaporoso diseño midi.

Para conseguir un look elegante y chic

Hay qué ver lo que cambia el estilo de este vestido cuando se añaden complementos más urbanos como un mini bolso de print de serpiente. Así lo hace Jessie Bush con su mini vestido blanco con volantes más dulce.

Para pasar el día en la playa

Sí, esta estética es extrapolable a túnicas y cover-ups. Si añades un sombrero de paja y unas alpargatas de plataforma, ya estás lista para un día playero, como Collage Vintage.

Que te sirva del día a la noche

Lucía Bárcena bien lo sabe. Y si no compruébalo con este mini vestido con bordados y volantes el cual se alía de maravilla con alpargatas de cuña altas.

Bien podría servir para un día a pleno sol, pero se adapta increíblemente bien gracias a su recogido sofisticado y unos pendientes dorados.

Y si refresca...

Tienes varias alternativas, todas muy estilosas: rebecas de punto, parkas caqui, sobrecamisas, camisas vaqueras, cazadoras denim oversized, blazers, cazadoras de lino... Y también trench muy funcionales (e increíblemente chic) como el de Melissa Villarreal.

Acentúa su lado campestre...

Y de ensueño con alpargatas, pamelas de paja, capazos y cestos de fibras naturales... Por favor, ¡póngame todos para llevar!

Puro verano

Con chanclas, por supuesto, porque no hay calzado que grite verano más que unas palas o chanclas.

Un toque francés

Y sofisticado, el de la influencer gala Sabina Socol combinando su vestido romántico con un par de sandalias con pedrería.


Si buscas darle el contraste inesperado...

Sí, funciona incluso con ugly shoes. Y si no, mira cómo lo mezclan sin tapujos las gemelas Lucía y Helena Cuesta con sandalias de suela chunky y correas de cuero negro.

Lo dicho, súper bonito y versátil, ¿qué más le puedes pedir?