Es elegante, sofisticado, glamouroso y sobre todo, especialmente favorecedor si una cuenta con unos hombros definidos y brazos tonificados. El escote halter, estrella absoluta de los años 70 gracias al diseñador Roy Halston, lleva algunas temporadas incurriendo en colecciones veraniegas y de baño, pero ahora la pasarela lo propone rematando vestidazos, monos y tops, y las firmas más comerciales parecen ya haber tomado nota.
Y, aunque su época dorada fuera la década de los 70, el escote halter siempre ha estado con más o menos presencia en nuestro armario. De hecho, su primera impulsora fue Madame Vionnet y sus vestidos drapeados, y en los años dorados de Hollywood fueron muchas las actrices que lo adaptaron como patrón favorito para resaltar su silueta. Por entonces la cintura se estrechaba, las caderas se acentuaban y el busto se realzaba con copas de pico, consiguiendo con este escote una voluptuosidad extra. Imposible de olvidar Marilyn Monroe con su vestido blanco levantado por el aire del metro.
Nada que ver con su vuelta en los años 2000, donde la estela del heroin chic era aún larga, y los escotes halters revelaban ausencia de sujetador y también de pecho, chicas delgadas y prácticamente planas eran las encargadas de lucir la versión cool del escote halter del momento. La misma Kate Moss lo hacía en su estilo sencillo pero ultra cool con vestido negro y tiras al cuello. Luego vendría el reinado de las divas del pop y con ellas, con JLo, Britney Spears o Christina Aguilera, el escote halter sería el compañero de vaqueros de talle bajo y amplio y melenas extralargas con ondas y raya en medio.
Recientemente si hay un escote halter que ha sido admirado y copiado, ese ha sido el elegido por Meghan Markle para su segundo vestido de novia, sencillo, impoluto y súper chic.
La propuesta de la pasarela
Pero volvamos al presente. El escote halter en las últimas temporadas ha vuelto a popularizarse gracias, en parte, a una de las diseñadoras del momento: Johanna Ortiz. La colombiana ha conseguido construir un estilo reconocible gracias a sus vestidos y conjuntos de tops y faldas con print tropicales y siluetas súper favorecedoras. Tras ella, multitud de firmas más accesibles se han inspirado en su silueta y ahora los vestidos halter de coloridos estampados están por todas partes (serán tendencia, lo aseguramos).
Pero no todo son propuestas de estilo 'folk' ni veraniegas. También hay sitio para siluetas minimal, románticas o súper sexys. En la pasarela hemos visto cuellos halter de gasa y en tonos empolvados de la mano de Giambattista Valli. También una silueta minimalista y muy sofisticada en Saint Laurent, o anudado, satinado y fluido como propone Anne Demeulemeester.
Romántico
Es la propuesta de Blumarine (en el centro) o Giambattista Valli.
Sexy
Al cuello y dejando ver mucha piel, como en la propuesta de Siriano o de Blumarine
Minimal
Saint Laurent (a la izquierda) lo propone sencillo, Anne Demeulemeester lo anuda y Valentino (derecha) lo acompaña de cuello de camisa.
Así lo hemos visto en la calle
Pero ¿cómo se combina en la calle? Hay predominio de la versión cruzada y al cuello, que deja el vientre al aire, y que le da ese efecto 'wow' a las blazers y los trajes de chaqueta. Vuitton vistió a muchas de las invitadas a su desfile con su top halter cruzado y armado, como el que luce Chiara Ferragni. Y la versión más llevadera, sin duda el tank top, prenda imprescindible del verano.
En vestido minimal
En versión tank top con pantalones cargo
En top oversize de efecto piel
Estampado y total look
Vestido de punto
Súper sexy con 'cut outs'
La opción ideal en monos
Enjoyada
De lentejuelas
Chiara Ferragni, con top Vuitton
Camisero
Cruzado, uno de los más vistos