Por si no lo sabes, el Ozempic es un medicamento para el manejo de la Diabetes tipo 2, pero en los últimos años, muchos profesionales lo han recetado para perder peso ¿Nos sorprende? No nos sorprende.

Como nutricionista, y como mujer, he vivido la constante presión de que mi cuerpo se vea de cierta manera, así que entiendo esa necesidad de perder peso. Pero… ¿a qué costo? ¿El Ozempic es seguro?

Es un producto que promete ayudar en la pérdida de peso rápida y “efectiva”, sí, pero debajo de eso, se esconde una serie de riesgos que deberíamos considerar antes de aferrarnos a él como la solución única.

Todo los estudios de Ozempic dicen que aunque haya pérdida de peso, al año se suele recuperar, como con todas las soluciones para perder peso.

¿Por qué? Porque no abordan las verdaderas causas de los problemas de salud y bienestar. No toman en cuenta factores determinantes de salud como la genética, la cultura, el acceso a salud, el estrés, el ambiente, la gestión emocional, salud mental, estado socieconómico, etc.

Y en lugar de ayudarnos a desarrollar una relación armoniosa con la comida, nuestro cuerpo, y el movimiento, el Ozempic es otra solución rápida y superficial que no se sostiene a largo plazo.

Efectos secundarios del Ozempic

Una de las principales preocupaciones con el Ozempic son sus efectos secundarios, que su propio laboratorio de origen ha confirmado. Desde náuseas y vómitos hasta diarrea, dolor abdominal, estreñimiento, mareos, cansacio, dolores de cabeza, y reacciones en el lugar de la inyección. ¿Vale la pena experimentar estos síntomas por perder unos cuantos kilos que luego de dejar la inyección van a regresar?

Además de los efectos secundarios físicos, el Ozempic también puede tener un impacto negativo en la salud mental y emocional. La dependencia de un medicamento para controlar el peso usualmente trae problemas de conducta con la comida y el cuerpo, y además, sentimientos de culpa, vergüenza y desesperanza

Otra cosa que me preocupa es que este medicamento perpetúa la mentalidad de dieta.

En lugar de acercar a las personas a adoptar un enfoque amable y compasivo hacia la alimentación y el movimiento, el Ozempic refuerza la idea de que la delgadez es igual a la salud y que la pérdida de peso rápida es la única forma de lograrla… Ya te adelanto que esto no es así.

Por eso, en vez de gastarte una renta (si, además es costoso) quizá tiene más sentido darle a tu cuerpo salud y probar un enfoque más holístico y compasivo hacia tu bienestar, que te acompañe a tener una relación saludable con la comida, el ejercicio y tu cuerpo.

Si quieres invertir en suplementos o complementos para mejorar la calidad de tu alimentación prueba con jengibre, cúrcuma, pimienta, canela, propóleo, e infusiones de romero o tomillo.

De igual forma recuerda que la salud no está en una sola pastilla, un solo alimento, o una dieta de moda, sino en el amor propio, la aceptación y el cuidado de una misma.

Se que eso no es tan sexy y atractivo como una inyección que te promete tanta felicidad, pero invertir en ti y en tu bienestar te da libertad y confianza, atributos que con una dieta y un medicamento es muy raro conseguir.