Cómo usar (bien) cada producto de 'styling'

Es un clásico, especialmente entre melenas rizadas, aunque no todos los expertos lo recomiendan: "Hace años se utilizaba mucho para definir rizos y el efecto final era el de un cabello seco y acartonado, ya que es un producto que suele contener alcoho l en su fórmula", cuenta Quique Sánchez, director creativo de Espacio Q. Es por ello que no hay que confundir la espuma con los productos en formato 'mousse': estos últimos sí son recomendables. "Son mejores para nuestro cabello y con con ellos conseguimos efectos parecidos a los de la espuma tradicional", afirma el experto. El mejor uso para este tipo de producto: dar volumen a melenas finas.

Es un producto todoterreno, según el estilista: "se aplica en seco, y puede hacerse repetidamente dependiendo del efecto de duración que queramos conseguir para fijar un peinado, unos rizos o unas ondas perfectas por mucho más tiempo". Eso sí, para evitar mojar el cabello y que el efecto resultante quede acartonado, hay que pulverizarla a unos 30 centímetros de la cabeza, "que el producto caiga como una bruma sobre el pelo", aconseja Sánchez.

Es una gran desconocida, pero todos los cabellos cortos deberían tenerla presente: "Da textura al cabello y nos ayuda a potenciar y sacar más partido a los cortes", asegura el director de Espacio Q. En cuanto a la cantidad de producto a utilizar: el equivalente a un garbanzo.

El nuevo producto de moda es apto para todas las melenas: "puede usarse tanto en cabello fino como en grueso, pero el efecto será más evidente en los primeros", cuenta Sánchez. Con él, el pelo gana en grosor y textura.

La tradicional gomina se ha transformado en productos de última generación, perfectos para conseguir el deseado efecto mojado, tanto en melenas sueltas como en recogidos y cabellos largos o cortos. "La cantidad de producto irá en función del largo, pero normalmente aconsejamos un garbanzo como medida estándar", afirma el estilista.