El verano es esa época del año en que no nos importa rendirnos a las cosas más naturales, más sencillas e imperfectas. Y es que el buen tiempo, las vacaciones y el ánimo relajado nos lo piden, instándonos a reflejarlo en todo lo que nos rodea y comenzando por nuestro atuendo (y calzado) veraniego, siempre ligero y lo más confortable posible para sobrellevar el calor de estos meses.
No hace mucha falta imaginarse que uno de tus básicos de cabecera de todos tus veranos se materializa en un par de alpargatas, cuya esencia permanece inmutable al paso del tiempo, a pesar de los giros estéticos y renovaciones inesperadas a los que las somete la industria de la moda.
Son la perfecta combinación entre sencillez, comodidad y effortless chic y, si te dejan, no les das mucho respiro porque todo te parece que queda bien con ellas. Nosotras también admitimos que, teniendo uno, dos o tres pares de alpargatas guardadas en el armario, no nos apetece otro calzado con el que combinar nuestros vestidos largos de verano, los vestidos de mangas abullonadas que tan de moda están últimamente o los tops más bonitos de la temporada. Porque es verdad que las sandalias (planas, de tacón sensato o con tiras) son guays para rematar cualquiera de nuestros looks de verano, pero con ellas no podemos librarnos de alguna que otra rozadura o herida en los pies. En cambio, la suela de esparto es tan blanda y confortable que nuestros pies se adaptan sin esfuerzo y adoran caminar sobre ella, por no hablar de sus suaves tiras de tela (si las llevan) que rodean con sutileza los tobillos y estilizan al máximo nuestras piernas.
Con este panorama tan halagüeño, tal vez no necesites que sigamos convenciéndote de sus virtudes funcionales y estéticas, pero sí una inspiración bonita y oportuna que te permita explorar los distintos registros (y escenarios) con ellas para destilar ese rollo casual natural (e ideal) tan deseado durante el estío: un manual de uso muy sencillo que te llevarán a combinarlas igual de bien con vaqueros como vestidos estampados, faldas midi, monos, tops preciosos...
Si ha llegado el momento de renovar y buscar tu par soñado, toma nota de todas las siluetas, estilos y texturas (planas, de cuña, con bordados, abalorios, de tela, cuero, lisas, con prints, tipo Mary Jane) que adornan los pies y tobillos de las prescriptoras de moda que mejor las llevan.
Con vaqueros y camiseta/jersey de rayas marineras
Y sus mejores compañeras son unas alpargatas de cuña en negro, tiras y suela incluidas o en textura natural.
Con vestido camisero
Con una tira slingback y corte peep toe, la típica alpargata que solían llevar nuestras abuelas se convierte en el mejor aliado para alargar la figura al máximo.
Con vestidos de flores
Vestido floral y alpargatas tal vez sea el combo más bucólico del verano. Apuesta por modelos en cuña para estilizar tus piernas, en tonos naturales.
Con vestido cruzado
Con estampado de micro flores, motivos florales más grandes, colores vibrantes, uno de los vestidos más favorecedores (y atemporales) quedan fetén con alpargatas en todas las suelas y estilos.
Con shorts
Elige un corte romántico como unos volantes o una manga abullonada en la blusa y un print romántico en tus shorts. Tonos naturales y suela de cuña para las alpargatas que realzan el conjunto.
Con rebeca/jersey de punto y vaquero
No hay nada que nos guste más que un jersey o rebeca de punto junto con tus vaqueros favoritos cuando veraneas en el norte o en un lugar donde refresca por las noches. Aderézalo con unas alpargatas de cuña lisas o estampadas y ya le das el rollo definitivo.
Con mono o peto
Tus alpargatas (de cuña o planas) triunfan de manera inesperada con un mono o un peto vaquero.
Con falda
Apuesta por llevar tus espardeñas con otro print veraniego, los cuadritos vichy multicolor que cubren con gracia una falda midi combinada con una clásica camisa blanca anudada.
Con total look en blanco y beis
Pantalón de lino y blusa en puro blanco para rematar con alpargatas. ¿Adivinas? También en blanco.
Con blusa pijamera y falda midi
Un conjunto sencillo y clásico que destaca por el cuello pijamero de la camisa blanca y las alpargatas de cuña negras.
Con shorts vaqueros y camiseta de lunares
Apunta esta otra gira de tuerca para tu próximo par de alpargatas: cuña y en corte de sandalia. Son especialistas en elevar elecciones sencillas, incluso shorts vaqueros y camisetas.
Con vestido de corte oriental
El estilo inesperado viene de Gala González y su modelo fusión alpargata y mercedita. El resultado son unas espardeñas súper cómodas y bonitas, que se adaptan a los looks menos convencionales del verano.