No siempre hablamos de novedades, los clásicos tienen esa condición precisamente por aguantar el tiempo y la constante competición de los productos nuevos. Esa 'resistencia beauty' es muy interesante, porque aquí se encuentran verdaderas joyas.
Reconozco que por las mañanas y más en verano utilizo bases de cobertura baja con protección solar, cremas con color o directamente cremas solares con algo de cobertura. Para el día a día funcionan muy bien, incluso para muchas noches. Pero, a veces, una quiere algo más de cobertura porque el plan exige horas por ahí y un maquillaje que resista mejor el paso de las horas.
Recuerdo que, antes de descubrir estas cremas solares con color, usaba base de maquillaje y claramente tenía una favorita. Años después y de vuelta noches algo más agitadas, abro el cajón y tengo mi última 'Vitalumière' de Chanel Beauty, el último bote que compré lo hice el verano pasado, por lo que el tono era perfecto para esta época donde me ha dado algo el sol.
Cobertura media, hidratante, perfeccionadora e inmejorable
"Ahora entiendo por qué me encanta esta base", es perfecta para pieles secas, es muy fina y con poquísimo producto cubre las imperfecciones sin tapar la cara. Es luminosa pero no brillante, muy hidratante y el color es absolutamente perfecto. Tiene un efecto perfeccionador espectacular y creo que vale cada euro que cuesta porque además es muy fluida y se extiende perfectamente. No sé por qué razón, supongo por no desperdiciar producto, pero la aplico con los dedos y queda verdaderamente bien.
Hay distintos tonos y en Druni está a un precio más asequible, rondando los 47 euros. Créeme cuando te digo que no te vas a arrepentir de pagar lo que cuesta, es un tesoro que entiendo que se mantenga intacta durante años en las primeras posiciones.
