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La nueva tendencia en micropigmentación se llama hairstroke y presenta un resultado tan hiperreal que no sabrás distinguir las cejas retocadas con esta técnica de unas naturales. Además, es mucho menos agresivo para la piel. Esta técnica, como nos cuenta Valentina Troni, fundadora de Tebori Brows y pionera del hair stroke en Madrid, “apenas cuenta con dos años y tiene su origen en las artistas rusas y brasileñas”.
En qué consiste el hairstroke
Como apunta Valentina Troni, “se trata de una técnica más cercana al sombreado, en la que se deposita el pigmento muy suavemente y sin arrastrar la aguja”. Como recalca Troni, “nos concentramos mucho en la técnica: no puede haber sangrado, no puede salir linfa”. Como subraya la fundadora de Tebori Brows, “no solo es una técnica muy artística sino que la preocupación por la piel es máxima”.
Como explica esta experta, “cuanto mayor el proceso inflamatorio, menor la retención de pigmento, por ello es una técnica extremadamente difícil de dominar y sólo apta para profesionales con mucha experiencia”. Para aprender el hairstroke Valentina se ha formado con expertas rusas y vietnamitas, con una técnica tan perfecta que son consideradas "la primera división en la micropigmentación”.
Ventajas del hairstroke frente al microblading
Para Valentina Troni el microblading, técnica en la que ha llegado a ser una de las mejores expertas de España gracias a su obsesión por la perfección, no permite más evolución. “El microblading está muy limitado, tiende a gris con el tiempo y es una técnica para una vez en la vida”, dice. “Con el paso del tiempo se hace un borrón y hay que quitarlo con láser”, añade. Esto, como explica Troni, ocurre porque “al ser un corte directo sobre la piel la tinta entra y, al cabo del tiempo, migra por dentro hacia los lados y termina a haciendo borrón”.
“Esto ocurre también con los tatuajes; la piel es un órgano vivo y complejo, en constante renovación. Las tintas son expulsadas a veces en su totalidad y a veces no. Pueden dejar antiestéticos residuos en la piel y ahí es cuando llega el momento de borrar”, dice la fundadora de Tebori Brows. ¿Quieres quitarte un tatuaje?
Ante este problema, que a Valentina le suponía tener que borrar muchos trabajos hechos con microblading, la experta buscó otra técnica que no tuviera este efecto a largo plazo. “Encontré el hairstroke y me enamoré. Primero porque no es agresiva y después porque el color permanece más fiel y no migra”, dice Troni. “Además, permite jugar mucho más con densidades y grosores al ser una aguja que deposita poco a poco el color y no hace un corte en la piel”.
La fundadora de Tebori Brows nos resume los motivos por los que en su centro le han dicho adiós al microblading en favor del hairstroke:
- ¡Más natural! Es una técnica hiperrealista en la que la creación de los patrones, los pelos de distintos grosores y acabados, son más parecidos a la ceja real.
- Menor traumatismo en la piel. El microblading, como su propio nombre indica en inglés, son micro cortes en la piel. El hairstroke se aplica con una microaguja más fina que el diámetro de un poro y no llega a cortar, sólo deposita el pigmento en mini puntos, lo que nosotras llamamos píxeles, y eso forma líneas.
- Mejor cicatrización. El pigmento no migra, como sí ocurre con el microblading, que tiende a expandirse con el paso del tiempo.
- Perfecta para casos de alopecia. Esta técnica permite crear un sinfín de efectos y no solo líneas. Aquí todo sobre la alopecia femenina.
Para quién está recomendado el hair stroke
Para quienes desean mejorar sus cejas pero no les gusta el efecto de microblading o la micropigmentación tradicional, ya que el efecto del hairstroke es tan realista que parece pelo real y además se hace siguiendo el patrón de crecimiento natural de la ceja. También es un procedimiento ideal para quienes quieren disimular imperfecciones y para quienes tiene problemas de alopecia que afectan también a las cejas. Y, por supuesto, para rejuvenecer la mirada.
Otra ventaja de esta técnica es que es apta para todo tipo de piel y mucho más cómoda y llevadera que la micropigmetación, ya que no produce sangrado ni dolor. La duración depende de cada persona pero el hair stroke puede durarte alrededor de dos años y requiere menos retoques que otras técnicas.
